Las pilas de combustible estacionarias son una tecnología de generación distribuida capaces de
generar electricidad y calor cerca del punto de consumo
Las pilas de combustible estacionarias son una tecnología de generación distribuida capaces de
generar electricidad y calor cerca del punto de consumo
Sector doméstico (1 – 5 kW), por ejemplo en viviendas unifamiliares donde el calor para calefacción
conlleva un consumo significativo
Sector industrial (250 kW – 1 MW), usado por ejemplo en plantas depuradoras o en la fabricación de
productos químicos, cuyos procesos de producción tienen consumos significativos tanto de calor
como de electricidad.
Sector residencial y comercial (10 – 50 kW), por ejemplo hospitales o polideportivos, donde también
es significativo el consumo de calor para calefacción.
Aplicaciones de las pilas de combustible.
Estacionarias, que tras emplear el hidrógeno como sistema de almacenamiento puede ser utilizado
para la generación de electricidad y calor en empresas, hospitales, zonas residenciales, y como
generadores de potencia en casos de emergencia cuando falle el suministro principal
Portátiles, orientadas a pequeños dispositivos eléctricos, cada vez más abundantes a nuestro
alrededor (ordenadores, Smart phones, pequeños electrodomésticos).
Aplicaciones al transporte, se contempla el uso de hidrógeno como combustible en pilas de
combustible para vehículos eléctricos de todo tipo (coches, autobuses, barcos), apareciendo cada vez
con más frecuencia, prototipos y modelos de prueba propulsados con estas tecnologías. Incluso está
prevista la comercialización de este tipo de vehículos para los próximos años.
Introducción:Según muchos expertos, pronto podremos encontrarnos con pilas de combustible para generar
energía eléctrica para todo tipo de dispositivos que usamos todos los días. Una célula de combustible es un
dispositivo que utiliza una fuente de combustible, como el hidrógeno, y un oxidante para crear electricidad a
partir de un proceso electroquímico. Al igual que las baterías que se encuentran bajo el capó de los
automóviles o en linternas, una célula de combustible convierte la energía química en energía eléctrica.