Desde 1950 la producción
agrícola ha ido aumentando
continuamente, a un ritmo
que ha superado con creces al
muy importante aumento de
la población, hasta alcanzar
una producción de calorías
alimenticias que serían
suficientes para toda la
humanidad, si estuvieran bien
repartidas.
El aumento de productividad
se ha conseguido con la
difusión de nuevas
variedades de cultivo de alto
rendimiento, unido a nuevas
prácticas de cultivo que usan
grandes cantidades de
fertilizantes, pesticidas y
tractores y otra maquinaria
pesada.
Este incremento se ha
conseguido, principalmente,
sin poner nuevas tierras en
cultivo, sino aumentando el
rendimiento por superficie,
es decir consiguiendo mayor
producción por cada
hectárea cultivada. Es lo que
se conoce como revolución
verde.
Problemas con la revolución verde
Los beneficios traídos por la
mejora agrícola de la llamada
Revolución Verde son indiscutibles,
pero han surgido algunos
problemas. Los dos más
importantes son los daños
ambientales, de los que
trataremos con más detalle a
continuación, y la gran cantidad de
energía que hay que emplear en
este tipo de agricultura.
Como es fácil de entender la
agricultura actual exige
fuertes inversiones de capital
y un planteamiento
empresarial
En la agricultura tradicional,
también llamada de
subsistencia, la población se
alimentaba de lo que se
producía en la zona próxima a la
que vivía.
Fue iniciada por el agrónomo
estadounidense Norman
Borlaug con ayuda de
organizaciones agrícolas
internacionales, quien durante
años se dedicó a realizar cruces
selectivos de plantas de maíz,
arroz y trigo en países en vías
de desarrollo
Los beneficios traídos por la
mejora agrícola de la
llamada Revolución Verde
son indiscutibles, pero han
surgido algunos problemas.
Los dos más importantes
son los daños ambientales.
Una ventaja de la
'revolución verde' es que
disminuyó la cantidad de
labor humana y aumentó el
rendimiento de cultivos
como el de arroz (91%) y la
caña de azúcar (41%),
incrementando los ingresos
en un 20%.
fue consecuencia del empleo de
técnicas de producción modernas,
concretadas en la selección genética y la
explotación intensiva de monocultivos
permitida por el regadío y basada en la
utilización masiva de fertilizantes,
pesticidas y herbicidas.
Maria Magdalena Mera Meza
Tercero de Bachillerato 'H'