Aprender la comprensión

Un docente de matemática les pide a los alumnos que diseñen una planta para un centro comunitario, incluyendo pistas de baile y un lugar para la banda de música. ¿Por qué? porque ese diseño implica varias formas geométricas y un área bien definida y los alumnos deben usar cuanto estudiaron sobre el cálculo de superficies para diseñar correctamente la planta (Ver capitulo 7).

Un profesor de historia les pide a sus estudiantes que mediten y escriban sobre sus experiencias laborales y su relación con los empleadores. ¿Por qué? porque muy pronto estudiarían la evolución Industrial y deberán centrarse en la forma en que esta configuró las experiencias de las diversas clases sociales en Estados Unidos, así como las relaciones entre los miembro de esas clases (ver capítulo 4).

Un docente de ciencia les pide a los alumnos que preparen declaraciones para fundamentar su posición respecto de si el presidente debería o no firmar un tratado internacional sobre el medio ambiente, ¿Por qué? porque para preparar esas declaraciones los alumnos tendrán que evaluar y explicar ciertas perspectivas científicas sobre el calentamiento de la tierra.

Los docentes que están actualizándose en las nuevas prácticas de enseñanza no se sorprenderá frente a estos ejemplos, establecen su empeño asumido para despertar en los estudiantes su espíritu reflexivo hacia los cursos que están aprendiendo, y para ayudarlos a relacionar características entre su vida y la asignatura, entre los principios y la práctica, entre el pasado y el presente y el futuro.

Los tres ejemplos vistos tiene algo en común que fueron desarrollados bajo las directrices denominadas marco conceptual de la Enseñanza para la Comprensión.

Nota: ¿La Enseñanza para la Comprensión? ¿Que piensa usted que he hecho durante todos estos años?

Alan Kiddser, docente de quinto y sexto grados.

Okinawa Japón

Enseñar con miras a la comprensión no es idea nueva, facilitar la comprensión ha sido unas de las metas mas alabadas de la enseñanza. Prácticamente todos los docentes enseñan para la comprensión, entre otras cosas. Establecemos metas de comprensión para los alumnos, queremos que entiendan el significado de la "Declaración de la independencia" y como se entreteje en el tapiz de la historia, queremos que vean la lógica en el teorema de Pitágoras, que descubran los complicados dilemas de Macbeth y los relacione con sus propias vidas. Aplicamos ciertas estrategias con el propósito de desarrollar esa comprensión. Procuramos explicar las cosas con claridad, buscamos la ocasión para aclarar conceptos. Dejamos tareas con final abierto como para dejar formulen algún experimento, criticar un libro o debatir una tema, diferentes tareas que construyen.

Sin embargo ayudar a un estudiante a adquirir comprensión es un arduo trabajo, con frecuencia descubrimos que nuestros estudiantes comprenden mucho menos de lo que esperamos, se confunden con las formulas algebraicas, no captan el sentido de los poemas, tiene dificultades para construir ensayos. Más aún no ven las conexiones de los temas aprendidos con su entorno.

Investigar la comprensión en los estudiantes confirma las dificultades implícitas en la empresa de la enseñanza para la comprensión.

Varias investigaciones han documentado los prejuicios de los estudiantes, por ejemplo frente a las matemática y de la ciencia, (por ejemplo considerar la evolución como el progreso a una perfección cada vez mayor), sus visiones provincianas de la historia (pensar que las condiciones de vida en el pasado o las condiciones de vida son semejantes lo que ellos han vivido), la tendencia a reducir a estereotipos las obras literarias complejas y así sucesivamente. Pese a todos nuestros esfuerzos la comprensión en el alumno aún parece difícil de alcanzar ¿Por que?

La dificultad de la enseñanza para la comprensión

Algunos aspectos parecen incidir en esto, primero enseñar para la comprensión es uno de los aspectos a trabajar dentro de la agenda del docente, esta entre otras (por ejemplo reforzar la autoestima del estudiante), segundo las escuelas y las evaluaciones no están dirigidos a apoyar a la comprensión, y tercero abundan las cuestiones estratégicas sobre ¿Qué currícula, actividades, evaluaciones ayudará a la comprensión?

Sobre los dos primeros factores, destacar la enseñanza para la comprensión es primordial sobre cualquier otra actividad, pero también es importante destacar las otras metas educativas, como las rutinas como respetar las reglas ortográficas, multiplicar, construir oraciones gramaticales, etc. Pero los alumnos no podrán aplicar si no han comprendido. La enseñanza para la comprensión debe ocupar un lugar privilegiado sin duda alguna.

Existen aspectos cuando calificamos como: la puntualidad, si el estudiante presento las tareas dentro del plazo estipulado, la participación en clase, el esfuerzo, la prolijidad, es sorprendente todos los aspectos que el docente debe tomar en cuenta.

En cuanto estrategias, el proyecto trató de establecer un enfoque de la planificación y de la enseñanza que permitiera a los docentes responder a una pregunta sumamente difícil: cómo fomentar la comprensión de los alumnos.

¿Qué es la comprensión?

Estableceremos la diferencia entre comprender y saber, cuando un alumno sabe algo, puede decirlo toda vez que se le pida que lo haga, la comprensión es una materia sutil y va más allá del hecho de saber pero ¿De que manera lo trasciende? Para dar respuesta a esta pregunta los investigadores del proyecto propusieron un visión de la comprensión denominada la perspectiva del desempeño (compatible con el sentido común, y con algunas fuentes de la ciencia cognitiva contemporánea) (ver Martha Stone Wiske)

Desempeño dice, en suma, que la comprensión incube a la capacidad de hacer con un tópico una variedad de cosas que estimulen el pensamiento, tales como explicar, demostrar y dar ejemplos, generalizar, establecer analogías y volver a presentar el tópico de una nueva manera.

	Creado por Yessenia Alfaro hace más de 5 años

Esta metodología pretende hacer que los docentes comprendan que la enseñanza no puede ser memorista.