Lea el siguiente texto y conteste.
Un perro ruin y un pérfido lobo enjuiciaron a una mansa oveja. El juez, experimentado coimero, preguntó al perro:
– ¿Qué problema te trae a este tribunal?
– Señor juez, hace tiempo presté a esta oveja un pan y se niega a devolvérmelo. El señor lobo no me dejará mentir.
– ¿Es cierto, lobo, lo que dice el perro?
– Sí, su señoría. No sólo fue un pan, sino diez panes -aseveró el falso testigo.
Ante el testimonio del perjuro, la acusada tuvo que pagar lo que no debía.
Días después la oveja encontró a los malvados dentro de una trampa. Al verlos, exclamó:
– ¡Oh, dioses! ¡Buen premio para la calumnia!
¿A quién enjuiciaron?
Selecciona una de las siguientes respuestas posibles: