“La evaluación debe ser una tarea periódica y automática, que no se ha hecho con la frecuencia debida porque en la mayoría de las bibliotecas no se habían fijado los objetivos y era imposible saber, de manera fehaciente, si la organización era buena y si el trabajo resultaba satisfactorio. Realmente no se debía emprender ninguna actividad sin objetivos fijados y sin el propósito de evaluar en su correspondiente momento el cumplimiento de los mismos.”
Selecciona una de las siguientes respuestas posibles: