Creado por Milton Giovanni Rodriguez Guerrero
hace más de 7 años
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Primero sentimos y luego pensamos y actuamos
Toda decisión está influida por la emociones y ni la sociedad ni las familias nos suelen enseñar a gestionarlas.
Todas las emociones y deseos son aceptables (no así los actos que ellas puedan provocar).
Todas las emociones y deseos son aceptables (no así los actos que ellas puedan provocar).
la indiferencia es más peligrosa que la ira o el odio
La convivencia armoniosa no surge de forma espontánea e instintiva.
“Cuando cada miembro ocupa su espacio natural, los demás tienden a gravitar hacia su propio lugar sin necesidad de luchas intensas”
Solemos atender primero las necesidades físicas (pues son más sencillas) pero tratamos menos (o incluso olvidamos) el amor, que será lo que les permitirá tener seguridad para amarse y para amar a los demás.
Hay que tener en cuenta que los hijos, antes que el lenguaje perciben mensajes emocionales
El conflicto puede enseñar a transigir, a establecer nuevas relaciones, a aprender a través de las experiencias, a perdonar, a comprender, a ponerse en el lugar de los demás, a cambiar de mentalidad, a llegar a un consenso, a ver el conflicto como una oportunidad de crecimiento…”
Cuanto más duro son los castigos menos probabilidad hay de que el niño cambio de actitud.
A menor responsabilidad menor motivación.
Felicidad: una de las variables importantes para conseguirla es tener la sensación de controlar nuestro destino.
En la adolescencia es cuando se empieza a ampliar el contexto; este hecho se da paralelamente a la falta de conocimientos prácticos y con una experiencia vital muy escasa.
A los adolescentes hay que retarlos porque el potencial mental es extraordinario.
Saber no es ni la mitad de importante que sentir (por tanto hay que soltar lastre de contenidos y dejar espacio para que puedan expresar sentimientos).
Como todo aprendizaje, el del amor y el sexo, también exigen esfuerzo, disciplina y ciertos conocimientos.
Las emociones mandan sobre nuestros pensamientos.
El estrés emocional continuado daña el cerebro
Lo contrario al amor y el miedo no es el odio sino el olvido.
Lo que demuestra que emoción y cognición están solapadas