Viviendo más frugalmente y evitando el consumo innecesario de bienes materiales (exceso de automóviles, de televisores, de ropa, de alimentos enlatados o sobre empaquetados, de alfombras y cortinas, uso excesivo del agua, de gasolina, electricidad) ya que el consumo desmedido de bienes ocasiona un agotamiento de los recursos naturales y un deterioro del ambiente.