PSICOBIOLOGÍA DE LA IRA, DE LA VIOLENCIA Y LA AGRESIVIDAD
PSICOBIOLOGÍA DE LA IRA
La ira es la emoción que precede a la acción de defensa.
Se trata de un mecanismo biológico humano en paralelo al de cualquier animal.
La ira puede ser consecuencia de una frustración que no es fruto de una agresión aunque la interpretemos como tal.
La creatividad nace como consecuencia de un proceso de represión de la ira o de la agresividad.
El estrés es la provocación de la ira, se manifiesta con cólera si se reprime; porque lo que se reprime es la acción, pero no los mecanismos neurovegetativos de respuesta, cuyas secreciones ya están en marcha.
SECRECIONES NEUROBIOQUÍMICAS EN EL ESTRÉS
Todas las emociones inducen a una conducta de respuesta y para que ello se produzca el organismo secreta unas sustancias inductoras de esta conducta. Estas sustancias endocrinas se denominan respectivamente hormonas, neurohormonas y neurotransmisores y son secretadas por las glándulas suprarrenales, por el hipotálamo (en el cerebro) o por las neuronas cerebrales, respectivamente.
La adrenalina y la noradrenalina son las secreciones endocrinas relacionadas con la ira, porque la adrenalina afecta al metabolismo de la glucosa
La otra hormona relacionada con la ira es el cortisol, un esteroide secretado por las glándulas suprarrenales.
Cuando la ira se desata del todo, tarda en calmarse especialmente si la persona enfurecida no puede emprender la enérgica acción física del ataque para lo que su cuerpo la ha preparado; por este motivo no desaparece tan pronto cesa la situación precipitante. Pues lo que se reprime es la acción y no los mecanismos neurovegetativos.
ESTRES
La reacción de estrés constituye la parte inicial de la respuesta, que se produce por la interacción de la información recibida por las vías aferentes al SNC, con los datos acumulados por el aprendizaje previo en el lóbulo temporal, las pautas de comportamiento diseñadas en el córtex frontal y la respuesta voluntaria condicionada en el sistema motor o mediante una respuesta somática condiciona por el sistema nervioso autónomo y el neuroendocrino.
Los estímulos desencadenantes del estrés son:
Los psicológicos, -emocionales-, constituyen los elementos elicitadores más potentes de la respuesta neuroendocrina al estrés.
Estímulos somáticos y viscerales
Estímulos de órganos especializados, que tienen su origen en los sentidos exteroceptores.
Estímulos emocionales, originados y modulados por el sistema límbico.
ADAPTACION DEL ESTRÉS
Intervienen fundamentalmente los sistemas monoaminérgicos con liberación de noradrenalina, serotonina, dopamina.
La primera, involucra en la reacción de alarma
La segunda, principalmente en el control de las reacciones emocionales frente a experiencias desagradables (dolor y estímulos adversos), e interviniendo en los ritmos circadianos y sueño.
La intervención de la dopamina resulta compleja, porque se puede considerar dividido en varios subsistemas. La conexión dopaminérgica, con el córtex pre frontal, hace que las novedades importantes sean de tipo estimulante hacia esa zona.
AGRESIVIDAD Y ALCOHOL
Según investigaciones realizadas, el alcohol no aumenta la agresividad de los machos sometidos o con bajos niveles de testosterona, sino solo la de los machos con altos niveles de testosterona. Lo cual es también significativo. Porque demuestra que el alcohol no incita a la violencia en sí mismo, sino que actuaría solo como reforzante de la autoestima.
El alcohol actúa como desinhibidor o secuestrador de lo racional y deja liberar los impulsos emotivos. Pero, la experiencia cotidiana demuestra que el alcohol induce a una mayor agresividad y a la violencia, ya sea como inductor primario o secundario. Pero tiene responsabilidad en el acto. Desde esta perspectiva, se produciría un círculo vicioso:
Alcohol, -Mayor autoestima, -Mayor agresividad, -Acto violento, -Despertar sexual