La función f es inyectiva si cada elemento del conjunto
final "y" tiene como máximo un elemento del conjunto
inicial "x" al que le corresponde. Es decir, que cada
elemento de "y" tiene como mucho uno de "x" al que
corresponde (pero esto no nos dice que todos los
elementos de "y" tengan alguno en "x").
Una función "f" es
inyectiva si, cuando
f(x) = f(y), x = y.
Ejemplo.
La función f(x) = 2x+1 es inyectiva.
Veamos que se cumple la
condición de inyectividad: