Los humanistas rechazan la
idea dominante en la edad
media: el teocentrismo
Querían unir los valores
clásicos con los cristianos.
La libertad es el don más preciado.
Se exalta al individuo y se
potencian todas su cualidades.
Retorno a la antigüedad
Para los humanistas, la cultura
greco-latina era el máximo exponente en
cuanto a realizaciones políticas y
culturales. Por ello se lanzan a su rescate.
Se multiplican las excavaciones, sobre todo en
Roma, encontrándose restos griego y romanos.
Los artistas se interesan por la arqueología.
A la luz de las obras clásicas, sobre todo de
Platón, encontraron el lugar excepcional del ser
humano en la naturaleza: dotado de razón, el
individuo es capaz de gobernarse a sí mismo y de
descifrar los misterios del Universo. Las obras
artísticas, científicas y literarias, reflejaban la
sensibilidad e inteligencia del ser humano y su
grandeza.
Los humanistas se inspiraban en hombres ilustris de la
antigúedad como en importantes figuras cristianos.
Uno de los más importantes representantes de estas
idea es Ersamo de Rotterdam.
La expansión del humanismo
El ideal de vivir plenamente
la condición humana
requería esfuerzo intelectual
Las Academias fueron las impulsoras del humanismo, en ellas los eruditos,
bajo el mecenazgo de algún príncipe, se dedicaban a la traducción de
manuscritos y al intercambio de conocimientos y opiniones.
El sabio también era un caballero,
capaz de desenvolver una intensa vida
social en las cortes renacentistas.
A partir del S. XV, la imprenta facilitó
enormemente la difusión de los textos
antiguos y, con ellos, de las ideas humanistas.
Reforma
La reforma protestante
En los últimos siglos de la Edad
Media, la Iglesia se había ido alejando
de sus funciones espirituales para
ocuparse cada vez más de asuntos
terrenales. La relajación de las
costumbres y de la moral del clero, así
como el desprestigio del papado
generaron un creciente malestar entre
los creyentes.
Algunos humanistas criticaron las prácticas
abusivas y defendieron una religiosidad más
personal basada en la lectura de la Biblia.
LA REFORMA DE LUTERO. Fue el detonante para la
ruptura de la Iglesia. Esta nueva doctrina se extendió
rápidamente por por toda Alemania, Suecia, Dinamarca,
Noruega, Países Bajos, Inglaterra y Suiza.Lutero empezó
sus críticas negando el valor de las indulgencias y el
poder de la Iglesia para concederlas y acabó elaborando
una nueva doctrina religiosa basada en 3 principios.
La justificación por la fe: La religiosidad
de una persona se basa en su relación
con Dios, a través de una fe intensa y
sin la intervención de la Iglesia.
El sacerdocio universal: El creyente
puede salvarse por su fe y convertirse
en su propio sacerdote.
La autoridad de la Biblia: Se rechaza
la tradición de la Iglesia y se reconoce
a la Biblia como única fuente de
inspiración cristiana. La
interpretación de la Biblia quedaba a
cargo de la conciencia individual de
cada creyente.
Casi al mismo tiempo que el
luteranismo nacen otras formas
de protestantismo en Europa.
El calvinismo se propagó en Suiza de la mano de
Juan Calvino. Tenía un carácter más radical que el
luteranismo y defendía que todas las personas tienen
determinado su destino después de la muerte
(doctrina de la predestinación). El calvinismo se
difundió por Francia (hugonotes) y por Inglaterra
(puritanos).
En Inglaterra, el anglicanismo surgió de la mano de Enrique VIII, cuando el Papa de Roma
se negó a concederle la anulación de su matrimonio con Catalina de Aragón. El monarca, mediante el Acta
de Supremacía (1.534) se separó de Roma y se autoproclamó jefe supremo de la Iglesia de Inglaterra. La
jerarquía eclesiástica quedó sometida al Estado, pero se mantuvieron muchos de los dogmas católicos y se