La Constitución peruana no reconoce expresamente a los derechos sexuales, ni a los derechos rerproductivos de las
personas. Sin embargo, si establece una serie de derechos intrínsecamente relacionados con ellos; nos referimos al
derecho a la dignidad, el libre desarrollo de la personalidad, además del derecho a la vida, a la integridad física y
mental, a la libertad de conciencia, a la libertad de información, a la intimidad personal, entre otros.
Derecho a la salud sexual y
la salud reproductiva.
Derecho a la libertad
reproductiva.
Derecho a la
elección de pareja.
Derecho a la
intimidad.
Derecho a la
confidencialidad.
Derecho a una educación integral para la sexualidad.
Derecho a disfrutar del
progreso científico.
Derecho a modificar tradiciones o costumbres
que violan los derechos de las mujeres.
Derecho a una vida
libre de violencia.
DERECHO SEXUALES
Decidir si ser o no sexualmente activo o activa; decidir cómo,
cuándo y con quien tener relaciones afectivas y sexuales en el
marco del mutuo respeto y consentimiento. Decidir si tener o
no pareja; consentir o no el matrimonio. Poder expresar
nuestras emociones y sexualidad. Buscar una vida sexual
placentera, segura y satisfactoria. Disfrutar de nuestro
cuerpo, recibir respeto por su integridad y a no ser sometidos
a ningún tipo de violencia física, psicológica o sexual. Derecho
a la privacidad sexual y decidir lo que queremos hacer con
nuestro cuerpo, sin hacernos daño ni afectando los derechos
sexuales de otras personas. No ser discriminado por nuestro
sexo, género, orientación sexual o cualquier otra causa.
Poder acceder a servicios de salud de calidad en los que se
garantice la privacidad y la confidencialidad. Estos servicios
deben incluir asesoramiento en aspectos biológicos,
psicológicos y sociales de la sexualidad. Poder buscar, recibir
e impartir información en relación con la
DERECHOS REPRODUCTIVOS
Decidir si deseamos o no tener hijos e hijas, cuándo, su
número y el tiempo transcurrido entre ellos y ellas. No ser
discriminada o recibir tratos desiguales por razón de quedar
embarazada o ser madre (en la escuela, el trabajo, dentro de
la familia, etc.). Las adolescentes embarazadas tienen derecho
a seguir asistiendo a la escuela donde estudiaban antes del
embarazo. Acceder a servicios de salud y atención médica
que garanticen una maternidad segura, libre de riesgo
durante la gestión, el parto y la lactancia, y que aseguren el
bienestar madre-hijo o hija. Recibir atención oportunidad y
de calidad cuando la vida de la mujer está en peligro debido al
embarazo. Recibir información y educación para garantizar la
autonomía reproductiva y la planificación familiar,
garantizando confidencialidad y privacidad, especialmente a
las y los adolescentes. Acceder a métodos anticonceptivos
seguros, aceptables y eficaces. Disfrutar del nivel más
elevado posible de salud reproductiva, libre de enfer