Este sentido nos permite oler y diferenciar los aromas que tienen las cosas.
ESTRUCTURA
Los órganos del sentido del olfato son las dos cavidades de la nariz llamadas fosas nasales o cornetes; ambas se comunican al exterior a través de las ventanas de la nariz, lugar por donde penetran los olores justamente en el aire que se respira. Las fosas nasales se encuentran separadas por el cartílago y protegidas por un vello que retiene el polvo que flota en el aire.
La cavidad de la nariz esta forrada por membranas mucosas que tienen receptores olfatorios conectados al nervio olfativo. Los olores consisten de vapores de diversas sustancias.
Los receptores del olor son sensibles a siete tipos de olores primarios que se puedan caracterizar como
Almizcle
Flores
Menta
éter
acre
podrido
Alcanfor
Los receptores del olor reaccionan con las moléculas de estos vapores y transmiten las sensaciones al cerebro
Función.
Es necesario que las sustancias que emiten algún olor o aroma estén en estado gaseoso y que la pituitaria esté húmeda. Esto último lo regula la propia membrana cuando está sana.
Cuidados
· No se debe hurgar la nariz, porque además de ser una costumbre antihigiénica se daña la membrana pituitaria. · No permanecer en habitaciones con olores penetrantes como el DDT, ajos, chiles tostados, detergentes, ácido clorhídrico, amoniaco, etc. · Al sonarse hay que hacerlo apretando sólo un lado de la nariz. Nunca se debe soplar con fuerza por ambas fosas nasales al mismo tiempo porque se puede causar una inflamación. · Atender de inmediato cualquier síntoma de catarro. Cuando éste se hace crónico altera el buen funcionamiento del sentido del olfato.