Es un proceso geológico asociado a la actividad ígnea que implica agua caliente o sobrecalentada. El
agua, a altas temperaturas, es una sustancia muy activa, capaz de desintegrar los silicatos y de
disolver muchas sustancias que normalmente se consideran insolubles.
Proceso magmático
Una solución hidrotermal se mueve hacia arriba, se enfría y los minerales disueltos se precipitan de la
solución. Para ser efectivos en generar suficiente mineralización para formar depósitos minerales, el
proceso debe ser continuo durante un periodo largo de tiempo.
Si el movimiento ascendente es lento, la precipitación de los minerales se esparciría sobre un área
amplia y no puede concentrarse suficientemente para formar deposito mineral. El enfriamiento súbito,
ocasionado por el movimiento rápido en fluido en capas porosas tales como venas y rocas brechadas
conduce al rápido enfriamiento la precipitación rápida de minerales en una región limitada.
La ebullición, la disminución rápida de presión, las reacciones con la roca caja y la mezcla con agua de
mar puede ocasionar también precipitación rápida y la concentración de depósitos minerales.
Origen
El agua expulsada de su fuente magmática se desplaza, lateral o verticalmente, para llegar finalmente
a la superficie donde aflora como fuente o manantial de agua termal.
Mineralización
Los depósitos minerales que se producen por este mecanismo de relleno tienen la forma del conducto
y, como la mayoría de los conductos son fallas y diaclasas, las formas más comunes son las vetas
(cuerpos groseramente tabulares).