Identificar claramente la distinción entre los conceptos académicos
utilizados, las hipótesis sostenidas por el autor y los datos presentados
Buscar información en otras fuentes que ayuden a
contextualizar la reseña
Leer el libro o artículo tomando apuntes en los márgenes.
Prestar especial atención a la introducción y la bibliografía
(para escribir la contextualización), al índice (para organizar la
descripción) y a las conclusiones (para escribir tanto la
contextualización como las evaluaciones y conclusión del
reseñador).
Intentar identificar puntos débiles, contradicciones, omisiones y errores en
el libro o artículo. Esto permitirá fundamentar las evaluaciones negativas.
Determinar en qué aspectos se realizan aportes válidos a la
disciplina. Esto permitirá fundamentar las evaluaciones
positivas
Durante la planificación de la reseña:
Hacer un mínimo esquema de qué se dirá en cada una de sus partes.
Incluir las tres partes: contextualización, descripción y evaluaciones, y
conclusión
Definir si la descripción de cada sección
del libro será extensa o resumida. A la
vez, si se incorporarán evaluaciones
parciales de cada una de las partes
descriptas o se realizará únicamente una
evaluación general al final
Durante la escritura de la reseña:
Prestar especial atención para distinguir con
claridad la voz del autor y la voz del reseñador.
Incluir las referencias bibliográficas únicamente si se utilizaron otros
textos además del reseñado.
Incluir citas textuales si resultan útiles para resumir una
postura del autor, ejemplificar un concepto o fundamentar
una crítica
No omitir ninguno de los datos relevantes del texto reseñado:
autor, año, título, lugar de publicación y editorial.
Recordar que la presentación de la postura
propia del reseñador y su justificación es muy
importante, dado que se trata de una de las
capacidades que se busca que los estudiantes
pongan en juego en este tipo de ejercicios