El sistema respiratorio está
formado por las estructuras que
realizan el intercambio de gases
entre la atmósfera y la sangre
El proceso de intercambio
de O2 y CO2 entre la
sangre y la atmósfera,
recibe el nombre de
respiración externa.
El proceso de intercambio de gases entre la
sangre de los capilares y las células de los
tejidos en donde se localizan esos
capilares se llama respiración interna.
Se divide en :
Tracto respiratorio superior
Nariz
La nariz es la parte superior del
sistema respiratorio y varía en
tamaño y forma en diferentes
personas. Se proyecta hacia adelante
desde la cara, a la que está unida su
raíz, por debajo de la frente, y su
dorso se extiende desde la raíz hasta
el vértice o punta.
Las fosas nasales, en su parte más exterior, están recubiertas por piel que contiene un
cierto número de pelos cortos y gruesos o vibrisas y, en su parte restante, por un epitelio
mucoso que impide la entrada de partículas suspendidas en el aire, a la vez que actúa
regulando la temperatura del aire, y que también contiene receptores sensitivos del olfato,
que constituyen la mucosa olfatoria.
Senos paranasales
Las fosas nasales, en su parte más exterior, están recubiertas por piel que contiene un cierto número
de pelos cortos y gruesos o vibrisas y, en su parte restante, por un epitelio mucoso que impide la
entrada de partículas suspendidas en el aire, a la vez que actúa regulando la temperatura del aire, y
que también contiene receptores sensitivos del olfato, que constituyen la mucosa olfatoria.
Senos frontales.
Se localizan entre las tablas interna y externa del
hueso frontal, por detrás de los arcos superciliares
Cada seno frontal comunica con
la fosa nasal correspondiente a
través del meato medio.
Senos etmoidales
El número de cavidades aéreas en
el hueso etmoides varía de 3 a 18
Desembocan en las fosas nasales
por los meatos superiores
Senos esfenoidales.
Suelen ser dos, y se sitúan en el hueso esfenoides. A
diferencia de los otros senos, éstos desembocan en las
fosas nasales por encima de los cornetes superiores.
Senos maxilares
Desembocan en la fosa nasal correspondiente por el meato
medio a través de un orificio situado en la parte superior
interna del seno, de modo que es imposible su drenaje
cuando la cabeza está en posición vertical, motivo por el que
se requieren maniobras especiales.
Boca
La boca es la primera parte del tubo digestivo, aunque también se emplea para
respirar. Está tapizada por una membrana mucosa y limitada por las mejillas y los
labios. El espacio en forma de herradura situado entre los dientes y los labios se
llama vestíbulo y el espacio situado por detrás de los dientes es la cavidad oral
propiamente dicha.
El techo de la cavidad oral está formado por el paladar, que consiste en dos partes:
una ósea, llamada paladar duro, formada por parte de los huesos maxilar, superior
y palatinos, y otra, llamada paladar blando o velo del paladar, formada por
músculos pares recubiertos de mucosa; la parte de detrás es libre y se llama úvula.
A cada lado del paladar blando hay elistmo de las fauces o puerta
de comunicación de la cavidad oral con la parte oral de la faringe u
orofaringe. Por su parte anterior la cavidad oral se comunica con el
exterior por la abertura de la boca.
Faringe
En su parte superior desembocan los orificios posteriores de las fosas
nasales o coanas, en su parte media desemboca el istmo de las fauces
o puerta de comunicación con la cavidad oral, y su parte inferior
continúa con el esófago, de modo que conduce alimentos hacia el
esófago y aire hacia la laringe y los pulmones.
Debido a que la vía para los alimentos y el aire es común en la
faringe, algunas veces la comida pasa a la laringe, lo que produce
tos y sensación de ahogo, y otras veces el aire entra en el tubo
digestivo, y se acumula gas en el estómago, lo que provoca eructos.
Nasofaringe
Se la considera la parte nasal de la faringe, ya que es una extensión hacia atrás de las fosas nasales.
Tiene una función respiratoria. Hay varias colecciones de tejido linfoide llamadas amígdalas; así, en su
techo y pared posterior, la amígdala faríngea (llamada popularmente vegetaciones o adenoides. En su
pared externa desemboca la trompa de Eustaquio, que es la comunicación entre el oído medio y la
nasofaringe
Orosofaringe
Es la parte oral de la faringe y tiene una función digestiva, ya que es la continuación de la boca a través
del istmo de las fauces. La orofaringe está limitada por arriba por el paladar blando, y por abajo por la
base de la lengua. Encontramos las amígdalas palatinas (que cuando se infectan son llamadas
popularmente anginas), lingual y faríngea. Todas ellas constituyen una banda circular de tejido
linfoide, situada en el istmo de las fauces, llamada anillo amigdalino o anillo de Waldeyer, que tiene la
misión fundamental de evitar la diseminación de las infecciones desde las cavidades nasal y oral hacia
los tubos respiratorio y gastrointestinal.
Laringofaringe
Es la parte laríngea de la faringe, ya que se encuentra por
detrás de la laringe. Se continúa con el esófago. Por su
parte posterior se relaciona con los cuerpos de las
vértebras cervicales 4ª a 6ª.
Laringe
Está localizada entre la laringofaringe y la tráquea,
y es una parte esencial de las vías aéreas, ya que
actúa como una válvula que impide que los
alimentos deglutidos y los cuerpos extraños entren
en las vías respiratorias.
Tres cartílagos son impares: el tiroides, el
cricoides y la epiglotis. Y tres cartílagos son
pares: los aritenoides, los corniculados y los
cuneiformes.
Cartílago tiroides.
Es el más grande de los cartílagos laríngeos y está compuesto por dos láminas
cuadriláteras de cartílago hialino que se fusionan por delante en la línea media,
formando la prominencia laríngea o nuez de Adán, que es más marcada en los
hombres porque el ángulo de unión de las láminas es mayor que en las mujeres
cartilago cricoides
Es el más inferior de los cartílagos laríngeos y tiene
la forma de un anillo de sello, con el sello dirigido
hacia atrás.
cartilago
epiglotis
Tiene forma de raqueta, está formado
por cartílago elástico y situado por
detrás de la raíz de la lengua y del
hueso hioides y por delante del orificio
de entrada a la laringe. Su borde
superior es libre y forma el borde
superior del orificio laríngeo, y su
borde inferior está unido al cartílago
tiroides
Cartilago aritnoides
Son dos. En cada uno de
ellos se inserta un
ligamento que forma
parte de una cuerda
vocal
Cartilago corniculados y cuneiformes
También son cartílagos pares y están formados por
cartílago elástico. Estos cartílagos se aproximan
cuando se cierra el orificio de entrada a la laringe en
el momento de deglutir.
Traquea
Es un ancho tubo que continúa a la
laringe y está tapizado por una mucosa
con epitelio ciliado. La luz o cavidad del
tubo se mantiene abierta por medio de
una serie de cartílagos hialinos (16-20)
en forma de C con la parte abierta
hacia atrás. Termina a nivel del ángulo
esternal y de la 4ª vértebra torácica, al
dividirse en los bronquios principales
derecho e izquierdo. El arco o cayado
de la aorta en un principio es anterior a
la tráquea y luego se coloca en su lado
izquierdo
Tracto respiratorio inferior
Bronquios
Los bronquios principales son dos tubos formados por anillos completos
de cartílago hialino, uno para cada pulmón, y se dirigen hacia abajo y
afuera desde el final de la tráquea hasta los hilios pulmonares por donde
penetran en los pulmones.
El bronquio principal derecho es más vertical, corto y ancho que el izquierdo, lo
que explica que sea más probable que un objeto aspirado entre en el bronquio
principal derecho. Una vez dentro de los pulmones, los bronquios se dividen
continuamente, de modo que cada rama corresponde a un sector definido del
pulmón.
Cada bronquio principal se divide en bronquios lobulares, que son dos en
el lado izquierdo y tres en el lado derecho, cada uno correspondiente a un
lóbulo del pulmón. Cada bronquio lobular se divide, a su vez, en bronquios
segmentarios que corresponden a los llamados segmentos pulmonares,
cada uno de los cuales tiene sus propios bronquio, arteria y vena
segmentarios.
Los bronquios segmentarios, a su vez, se dividen en bronquios más pequeños o bronquíolos que se
ramifican en tubos más pequeños, de un modo repetido hasta formar los bronquíolos terminales.
Toda esta ramificación bronquial se parece a un árbol invertido y por ello se llama árbol bronquial
Pulmones
Los pulmones son los órganos esenciales de la
respiración. Son ligeros, blandos, esponjosos y muy
elásticos, y pueden reducirse a una tercera parte de su
tamaño cuando se abre la cavidad torácica.
El pulmón izquierdo está dividido en un lóbulo superior,
que presenta la escotadura cardiaca en donde se sitúa el
corazón, y un lóbulo inferior. El pulmón derecho está
dividido en tres lóbulos: superior, medio e inferior.
Cada pulmón presenta un vértice, una base y dos caras. El
vértice es el polo superior redondeado de cada pulmón y
se extiende a través de la abertura superior del tórax, por
encima de la primera costilla. La base o cara
diafragmática se apoya en la superficie del diafragma
que separa al pulmón derecho del hígado y al pulmón
izquierdo del hígado, el estómago y el bazo.
El hilio de cada pulmón se encuentra cerca del centro de la cara interna, está rodeado por la pleura y
es la zona por donde pasan las estructuras que entran y salen de cada pulmón (arterias, venas,
bronquios, nervios, vasos y ganglios linfáticos), que forman los pedículos pulmonares, que también
están rodeados por la pleura. De este modo, los pedículos unen la cara interna de cada pulmón al
corazón y la tráquea
Las venas pulmonares recogen la sangre
oxigenada desde los pulmones y la transportan a
la aurícula izquierda del corazón. A su vez, las
venas bronquiales recogen la sangre venosa de los
bronquios.
Unidad respiratoria
Los bronquios se dividen una y otra vez hasta que su diámetro es
inferior a 1 mm, después de lo cual se conocen como bronquiolos. Los
bronquiolos se subdividen a su vez en bronquiolos terminales. Estos se
subdividen hasta formar los bronquiolos respiratorios.
La unidad respiratoria es la zona del pulmón que está aireada por un
bronquiolo respiratorio. Cada bronquiolo respiratorio se divide en
varias vías llamadas conductos alveolares que, a su vez, se abren a
numerosos sacos alveolares y alvéolos y cada alvéolo es una bolsa
redondeada, abierta por un lado, con un diámetro medio de unas
300 micras, que tiene una pared extremadamente delicada formada
por un epitelio plano simple. En los dos pulmones hay unos 300
millones de alvéolos.