La educación, según la UNESCO en todas sus formas y todos sus niveles,
no es sólo un fin en sí mismo, sino también uno de los instrumentos
más poderosos con que contamos para inducir los cambios necesarios
para lograr un desarrollo sostenible
Educar para el desarrollo sostenible es incorporar
en los sistemas educativos los temas
fundamentales del desarrollo sostenible
Cambio climático
la reducción del riesgo de desastres
la biodiversidad
la reducción de la pobreza
Consumo sostenible
permite que el ser humano adquiera los
conocimientos, las competencias, las actitudes y los valores
necesarios para forjar un futuro sostenible.
La educación para el desarrollo sostenible va más allá de la
mera difusión de conocimientos, definiendo no solo el
contenido del aprendizaje, sino también la pedagogía y el
entorno del aprendizaje
exige métodos participativos que motiven a los alumnos y les doten de
autonomía, a fin de cambiar su conducta
promueve la adquisición de competencias tales
como el pensamiento crítico, la elaboración de
hipótesis de cara al futuro y la adopción colectiva de
decisiones
ha de habilitar a los educandos para
transformarse a sí mismos y a la sociedad en la
que viven mediante la adopción de estilos de vida
sostenibles y convirtiéndolos en ciudadanos del
mundo activos y participativos
la educación para el desarrollo sostenible tiene como
objetivo último la transformación social