La Gran Depresión, también conocida como crisis de 1929, fue un período a principios del siglo XX en el
cual el mundo entero estuvo bajo una profunda crisis económica y social, que perduró por
aproximadamente una década. La Gran Depresión comenzó en 1929 y se prolongó hasta 1940. Esta
afectó a la mayoría de los países del mundo, desde los más industrializados hasta los más pobres, y se
convirtió en el período de recesión económica más severo del siglo XX.
ECONOMIA
La principal consecuencia
económica consistió en la
reducción de consumo, la cual
llevó a cerrar a muchas empresas
que se vieron afectadas por la falta
de demanda.
se redujo notablemente la producción
industrial y aumentaron las cifras de
desempleo a través de todo el mundo.
Estados Unidos pasó casi 4 años con
indicadores económicos negativos.
Numerosos bancos quebraron como
consecuencias del impago de muchas
personas que suscribieron créditos
el consumo descendió, lo que significó una caída de
precios y la circulación monetaria. Muchas
empresas, de diferentes sectores, se vieron
obligadas a cerrar.
Los gobiernos, con la esperanza de solucionar la situación
interna, comenzaron a adoptar medias proteccionistas.
Todo ello, conjuntamente, dio lugar a que la actividad económica
se frenara. Por ello, la renta nacional y la riqueza de muchos
países se vio mermada.
POLITICA
A partir de la crisis mundial en diferentes
países, principalmente europeos, surgieron
formas de gobierno totalitarias en países
como Alemania, Italia y España, que luego
originaron la Segunda Guerra Mundial en
1939.
La FALTA de trabajo y la desigualdad social
incrementaron el comunismo como
pensamiento político e ideológico, ya que
este modelo les proveía a las personas un
colchón económico asegurado ante la
inestabilidad económica.
Las democracias liberales comenzaron a ser
puestas en duda, desde diferentes corrientes
políticas e ideológicas.
desde otros sectores se comenzó a ver al
socialismo soviético como una posible
alternativa. A pesar de las muchas diferencias, la
intervención económica del Estado, aunque con
muchos matices, era un elemento en común.
Las intervenciones estatales parecían aptas para
paliar los efectos de la crisis.
También en los países con un sistema capitalista
liberal se implantó la idea de intervenir en la
economía
MEDIDAS DE SOLUCION
El impacto de la crisis fue diferente
según los países, por lo que los
intentos de solución también fueron
diversos. En general, se produjo un
cierre proteccionista de los mercados,
que Francia e Inglaterra soportaron
bien ya que sus posesiones coloniales
garantizaban el abastecimiento de
materias primas y la venta de
productos manufacturados.
Completamente dispar era la situación
en Alemania, Italia y en los países
centroeuropeos. Desde la llegada de
Hitler al poder (1933), se intensifican
las compras a los países del entorno,
pero realizando los pagos en productos
alemanes, con lo que Alemania se
adueñaba de las economías
centroeuropeas. Una política de obras
públicas y de fabricación de
armamentos permitió reducir
rápidamente sus seis millones de
parados. La fuerte intervención estatal
había permitido que, ya en 1936,
Alemania fuera otra vez una gran
potencia.
Por otra parte, los Estados Unidos disponían de las mayores reservas
de oro del mundo y, para mantener el patrón oro, hubo de conceder
cuantiosos préstamos a Europa. Tal fue el origen de los planes
Dawes y Young.
NEW DEAL
“nueva distribución de las rentas”, llamada “New
Deal”, que reduzca la capacidad de producción
mientras aumenta el poder adquisitivo. Hay tres
medidas principales que se engloban dentro de
este cambio de rumbo.
Primero, están las medidas
financieras. Con el fin de detener la
cadena de quiebras bancarias,
autorizan a la Reserva Federal a
conceder a los bancos créditos sobre
títulos y efectos descontables. En
otras palabras, aprueban el uso de
la inflación, que es legalizada en
abril de 1933.
También tiene un apartado social: la lucha contra
el paro. En mayo de 1933, se autoriza el pago de
subvenciones federales a los distintos Estados
para que estos distribuyan ayudas a los parados.
Combinado con esta política, se empezaron a
realizar grandes obras públicas en las regiones
más atrasadas del país. No fueron construcciones
aleatorias, sino orientadas a ofrecer posibilidades
de empleo futuro, como por ejemplo en
Tennessee, donde se crearon presas
hidroeléctricas y sistemas de riego.
Por último, se matizó la política de
producción y de las rentas. Tras una
serie de trabas impuestas por la Corte
Suprema (dominada por el Partido
Republicano), Roosevelt vuelve a ganar
en las urnas en 1936 y decide crear tres
leyes nuevas: la segunda AAA (ley de
agricultura), el National Labor Relations
act (fijaba el poder sindical) y el Fair
Labor Standard act (marco general de
los contratos laborales y 40 horas de
trabajo). Con esta nueva legislación se
obligaba a reducir la producción
agrícola e industrial, mientras que se
fijaban nuevas rentas más solventes.