El mundo antiguo se vio atacado por enfermedades que se extendieron velozmente con caracter
epidemico o pandemico produciendo gran mortalidad
En labiblia es donde se
encuentran las primeras
menciones de la peste. En
Antiguo Testamento hay claras
alusiones a ella.
Peste de Atenas
(428 a.C) Esta fue una epidemia
devastadora que afecto principalmente a
la ciudad de Atenas.
Hubo numerosas victimas; los
medicos no podian hacer
mucho, ya que ellos
desconocian esta peste y
morian atendiendo pacientes.
Sintomas
Dolor de cabeza, ojos rojos e inflamados, la
lengua y la graganta tenian un aspecto
sanguinolento, la respiracion se tornaba
irregular y el aliento fetido.
Cuenta Tucidides que de 29.000
hoplitas murieron 4.400 y de 12.000
soldados de caballería murieron 3.000.
No se sabe con certeza qué peste fue,
si fue peste bubónica, tifus, tifoidea,
escarlatina o dos infecciones juntas. Lo
que queda claro es que las
consecuencias de la peste fueron
desastrosas para Atenas. Una de las
víctimas de la epidemia fue el gran
estadista Péricles.
Peste de Agrigento
Diógenes Laercio recogió varias
leyendas sobre la muerte de
Empédocles, que además de
filósofo y físico, fue conocido por
sus habilidades como médico y sus
actividades relacionadas con la
magia o con el chamanismo.
Se dice que Empedocles curo
varios enfermos infectados
con esta peste, que hacia que
las personas fallecieran casi
que instantaneamete y le
dificultaba el parto a las
mujeres embarazadas.
Peste de Saracusa
Esta plaga sobrevino en el año 396
a.C, cuando el ejército cartaginés
sitió Siracusa, en Itália. La
enfermedad surgió entre los
soldados cartagineses,
expandiéndose rápidamente entre
ellos y diezmando su ejército .
Se manifestó inicialmente con síntomas
respiratorios, fiebre, tumefacción del
cuello y dolores costales. Seguidamente
aparecían disenteria y erupciónes
pustulosas en toda la superficie del
cuerpo. Los soldados morían entre el
cuarto y sexto día, con ataques de delirio
y sufrimientos atroces. El Imperio
Romano fue el gran beneficiario de
aquella epidemia, venciendo fácilmente a
sus invasores.
Peste de Justiniano
Una epidemia de peste vino a
oscurecer el mandato del emperador
Justiniano. Era la primera epidemia de
peste de la que se tiene constancia. La
enfermedad y con ella el miedo y la
histeria- se expandió por
Constantinopla, una ciudad de casi
800.000 habitantes, a una velocidad
vertiginosa.
Incluso el propio Justiniano fue víctima
de la peste, aunque terminó
recuperándose. Al final de la epidemia,
la capital imperial había perdido casi el
40% de su población, y en todo el
imperio se había cobrado la vida de 4
millones de personas.
Consecucncias Economicas
fueron catastróficas, pues hubo momentos en que
el número de muertos superaba el de vivos.
Muchos historiadores ven en este debilitamiento
del Imperio bizantino una de las líneas divisorias
entre el ocaso de la Antigüedad y la floreciente
Edad Media.