Es una magnitud cuantizada, lo que
quiere decir que cualquier cuerpo es
siempre un múltiplo del valor de “e”.
Existen tres tipos de cargas, las positivas (cuando
existen menos electrones que protones), las
negativas (cuando existen más electrones que
protones) y las neutras (cuando existe igual número
de protones y electrones). Las cargas iguales se
rechazan y las distintas se atraen.
La fuerza de atracción o repulsión
entre las cargas varía con el inverso
cuadrado de su distancia de
separación.
Las cargas eléctricas ni se crean ni
se destruyen porque su valor es
constante.
Las cargas que permiten el movimiento por la superficie
de determinados cuerpos reciben el nombre de
conductores y las que no lo permiten, se conocen como
aislantes.