Pero ¿Por qué no todos reaccionamos igual ante las
distintas crisis? La respuesta es: Por nuestro
temperamento y el apoyo social que podamos adquirir
¿Qué es el temperamento? Es la forma de ser
y de pensar de una persona. Existen 4
temperamentos.
Colérico: Es La cabeza fría cuando otros
pierden la suya. La decisión clara que ilumina
mentes confusas. El liderazgo para guiarnos
al bien. La audacia para arriesgarse en
situaciones ambiguas. La confianza
inquebrantable ante el desprecio. La
independencia para mantenerse firme ante la
adversidad. El guía cuando nos extraviamos
de la meta. El impulso de “tomar armas contra
un mar de problemas y luchando, acabar con
ellos” Es quien sueña con lo imposible y aspira
alcanzar la más lejana estrella. Siempre
planeando, alcanzando y teniendo éxito
Sanguíneo:El levantador del ánimo en
tiempos difíciles. El toque de inocencia en
una era desmoronada. La palabra divertida
cuando estamos agobiados. El humor
cuando estamos tristes. El destello de
esperanza que disipa nuestras nubes
negras. El entusiasmo y energía para
comenzar una y otra vez. La creatividad y
encanto que le da color a un día gris. La
ingenuidad de un niño en situaciones
complejas. El vivir en las nubes y soñar con
cuentos de hadas. El querer vivir feliz para
siempre.
Flemático: La estabilidad para no
desviarse de su meta. La paciencia para
soportar a los provocadores. La capacidad
de escuchar a los demás. El don de poder
reconciliar a los grupos enfrentados. El
deseo de paz casi a cualquier precio. La
compasión para consolar a los que sufren.
La determinación de mantener fría la
cabeza, mientras otros pierden los
estribos. La habilidad de vivir de tal
manera que ni aún sus enemigos
encuentran algo que criticar.
Melancólico: La intensidad para buscar a los
verdaderos valores de la vida. El
temperamento artístico para apreciar la
belleza de la naturaleza. El talento para
producir una gran obra de arte. La
capacidad de analizar y llegar a la solución
correcta. El perfeccionista mientras los
demás trabajan desordenadamente. La
meta de terminar lo que han empezado. El
lema “Si vale la pena hacerlo, vale la pena
hacerlo bien” El deseo de “hacer todo
decentemente y en orden”.