A lo largo de la historia la tecnología ha hecho que la vida
diaria sea más fácil.
Al principio de los tiempos, los seres humanos construían
herramientas tallando piedras y uniéndolas a un palo, así
hacían hachas, azadas y demás utensilio para el hogar y la
casa.
El hierro y el bronce se utilizaron para hacer armas
para cazar y defenderse de otras tribus, utensilios
para la vida diaria, como cuchillos, vasijas, etc., y
utensilios para el cultivo de alimentos.
En la edad media se hicieron grandes innovaciones tecnológicas derivadas de la necesidad medieval
y la falta de mano de obra, la revolución de las energías animadas (caballerías) y las inanimadas
(agua y viento).