Las fuentes
renovables de
energía son
aquellas que no se
gastan aunque se
empleen.
El sol: El sol
emite la
energía en
forma de luz y
calor.
La luz se capta
mediante placas
fotovoltaicas y se
transforman en
energía eléctrica
El calor se capta con los
colectores solares. Se usa
para proporcionar
calefacción o agua
caliente en los hogares y
se puede transformar en
energía eléctrica.
El viento: El viento posee
energía mecánica, que es
capaz de mover objetos
como las aspas de los
molinos o los barcos
veleros. Se trata de la
energía eólica.
Los aerogeneradores
son grandes molinos
que producen energía
eléctrica al girar por el
viento.
El agua: El agua, cuando está
en movimiento, posee energía
mecánica. Para aprovecharla se
construyen presas en los ríos
que originan saltos de agua. Su
energía se transforma en
electricidad en las centrales
hidroeléctricas.
El calor interno de la
tierra: La tierra posee
energía térmica en su
interior, llamada energía
geotérmica.
La biomasa: Son todos
los restos de seres vivos,
como la madera, la paja o
las heces del ganado. Esta
biomasa posee energía
química.
La fuentes no
renovables de energía
son recursos
naturales limitados,
por lo que se pueden
agotar.
Los combustibles fósiles
Carbón
Se emplea en las
centrales térmicas
para producir
electricidad o se
utilizan para la
calefacción de las
viviendas
Petroleo
Del petroleo se
obtiene la gasolina y
el gasoil, que se
emplean en el
transporte, para
calefacción . . .
Gas natural
Se emplea en las
centrales térmicas
para producir
electricidad para la
calefacción de las
viviendas
El uranio y el plutonio
Son sustancias de origen
mineral. Se utilizan en las
centrales nucleares. Produce
energía eléctrica.