Para los musulmanes Mahoma es el profeta
de Dios. Él empezó a tener revelaciones de
la palabra de Alá a través del arcángel San
Gabriel, por lo que memorizó sus palabras
y las predicó en la Meca. Tuvo que huir
pero logró expandir al islam y ganar fieles
por toda la península arábiga.
Definición
Religión monoteísta que tuvo su origen
en las enseñanzas del profeta Mahoma
en Arabia, las cuales están recogidas
en el Corán; se caracteriza por respetar
cinco pilares fundamentales.
El Corán
Es el libro sagrado del Islam. Contiene las
revelaciones que le hizo Dios al profeta
Mahoma, por medio del ángel Gabriel. Se habla
de la relación que Alá posee con los seres
humanos y de cómo serán juzgados. Está
dividido en 114 suras (capítulos) y versículos,
que hablan sobre las creencias musulmanas.
Cinco Pilares
La profesión de fe
La oración ritual cinco
veces al día y el viernes
en la mezquita
El ayuno durante el
mes del ramadán
La peregrinación a La
Meca por lo menos
una vez en la vida
La limosna a los pobres
Su expansión
Mahoma se convirtió en un líder que
logró unificar a los pueblos árabes, que
superaron sus diferencias por medio de
la religión. Después de su muerte, sus
sucesores adoptaron el título de califas y
se lanzaron a la expansión de su
ideología, que se divide en etapas.
Califato abasí: Bagdad se convirtió en sede del
poder. Durante este califato, hubo una cierta
etapa de esplendor. El poder de este califato
fue fragmentándose lo que favoreció la
expansión de los reinos cristianos en Europa.
Califato omeya: Accedió al poder la
familia de los Omeyas. En la península
Ibérica, los árabes establecieron un
reino llamado Andalús. Con los Omeyas,
llegó la división entre los musulmanes.
Califato ortodoxo: En esta etapa, los
sucesores del poder fueron elegidos
entre los familiares y amigos del
profeta Mahoma. Residieron en
Medina y concentraron el poder
político y económico.
Comparación con la
religión Católica
En el Islam el profeta es Mahoma y el libro
sagrado es el Corán, mientras que el cristianismo
se basa en la Biblia y fue transmitido por Jesús.
En el Islam se debe rezar obligatoriamente y no se
veneran imágenes, mientras que la religión católica da la
opción a rezar y no prohibe la adoración de imágenes.
Ambas adoran o veneran a un Dios y
hablan de una vida después de la muerte.
Martina Calderón, Carolina Hidalgo y Natalia Novillo