Los
hidratos de carbono, las
grasas, las proteínas, las
vitaminas, los minerales
y el agua proporcionan
calor y energía, regulan
los procesos corporales
y aportan sustratos
para el crecimiento del
organismo. Cada
nutriente tiene sus
propias funciones, de
forma que la
alimentación debe ser
completa.
Los hidratos de carbono
Los hidratos de carbono son
fuentes de energía inmediata, ya
que constituyen el combustible del
organismo. Además de formar
parte de las membranas de las
células y de tener funciones
estructurales menores, la energía
que proporcionan se utiliza
durante los primeros minutos en
que se realiza un esfuerzo, y
después se empiezan a consumir
grasas. Hay varios tipos de
hidratos de carbono. El más
rápido es la glucosa, que en
pocos minutos pasa del aparato
digestivo a la sangre, y de ahí a
los músculos. Los hidratos de
carbono suelen dividirse en dos
categorías: simples y complejos.
Las grasas
Los ácidos grasos son esenciales
para el organismo: es necesario
consumir dos o tres cucharadas de
aceite al día, puesto que las grasas
forman estructuras básicas de todas
las células, proporcionan algo más del
doble de calorías por gramo que los
hidratos de carbono y las proteínas, y
además suministran la forma más
concentrada de energía de la dieta
cuyo exceso se deposita en las
células de grasa (o adipositos) del
organismo. Las grasas transportan las
vitaminas liposolubles A, D, E y K y
proporcionan aislamiento y protección
a los órganos y el esqueleto. Hay tres
tipos de grasa: la saturada, la
monoinsaturada y la poliinsaturada.
Las proteínas
Las proteínas son la segunda
sustancia más abundante del
organismo. Tienen un papel
importante en el desarrollo y la
reparación de todos los tejidos.
Las proteínas están compuestas
de unas unidades llamadas
aminoácidos. El cuerpo humano
necesita aproximadamente 22
aminoácidos para formar proteínas.
Las vitaminas
Las vitaminas desarrollan funciones muy específicas
en el organismo. Su función es catalizar las reacciones
químicas. Algunos procesos químicos requieren la
presencia de varias vitaminas simultáneamente.
Los minerales
Son compuestos inorgánicos que se encuentran en la
tierra, las rocas y el agua. Se precisan unos
diecisiete minerales para el buen funcionamiento del
organismo. Actúan como catalizadores en la regulación
de las contracciones musculares y en la transmisión
de impulsos nerviosos, y participan en la digestión y
el metabolismo de los alimentos.