Es un mapa conceptual donde se incluyen ventajas y desventajas de los diferentes tipos de procesamiento tanto en el tipo asimétrico como el asimétrico.
Incrementan el rendimiento
por incrementarse el número
de procesadores, se
incrementa la cantidad de
trabajo en un tiempo menor.
Si un procesador falla, es posible que sus
tareas sean repartidas entre los demás y no es
necesario que todo el sistema sea parado o
que falle el sistema.
Las funciones pueden ser
distribuidas al tener más de un
procesador, ya que al ocurrir un
fallo, el sistema no se detiene, sino
que se hace más lento.
Permite compartir dinámicamente
trabajos y recursos entre los
distintos procesadores, y puede
reducir la varianza entre los
sistemas.
Desventajas
Como consecuencia del accesos simultáneo
a la memoria, se producen colisiones y
esperas, lo que representa un problema.
Conforme a la organización de la arquitectura, es
poco escalable en número de procesadores, debido a
que puede surgir un cuello de botella si se aumenta el
número de CPU.
El número recomendado para esta configuración es no
más de 8 procesadores, ya que después de este
número el rendimiento tiende a disminuir.
Asimétrico
Ventajas
La ventaja de éste es que al aumentar más
procesadores se tiene que hacer un cambio mínimo
y fácil para el manejo de éstos y en general se
eliminan muchos problemas de integridad de datos.
La distribución correcta de carga de trabajo del
procesador maestro hacen un sistema eficiente.
Desventajas
El procesador maestro puede ser un cuello de botella
en el rendimiento, y todo depende de él, si falla,
entonces todo se viene abajo y no se puede continuar.
El procesador maestro puede no asignar
equitativamente las cargas de trabajo por lo
que puede haber fallas de eficiencia.
Actualmente no hay mucha información
referente a este tipo de sistemas, por tal
motivo sólo se ofrecen ideas generales acerca
de su funcionamiento.