Empezamos por este planeta al ser el más cercano al
Sol, a parte de ser el más pequeño de sus homólogos.
Tiene un parecido a la Tierra, pues su composición es del
70% de elementos metálicos y el 30% restante
corresponde a silicatos. Además, al igual que sucede con
la Luna, Mercurio presenta un gran número de
impactos de meteoritos.
Venus
A Venus le corresponde el puesto número dos en cuanto a
distancia con respecto al Sol. Dentro de los Planetas del
Sistema Solar, suele denominarse a Venus como el planeta
“hermano de la Tierra” debido a su parecido, tanto en tamaño
como en masa y su composición de tipo terrestre y rocoso.
Tierra
Tierra El planeta Tierra, nuestro planeta, es el mayor de los
denominados planetas rocosos. Se formó hace unos 4600 millones
de años y su nombre proviene del latín “Terra”, deidad griega que
corresponde a la feminidad y fecundidad. El 71% de su composición
corresponde a la hidrosfera (agua), hecho diferencial que ha
permitido la existencia y persistencia de la vida humana. Ningún
otro planeta del Sistema Solar contiene tal nivel de líquido.
Marte
Marte es el segundo de los planetas del Sistema solar de
menor tamaño, después de Mercurio. Desde hace tiempo es
comúnmente conocido como “planeta rojo”, fruto del color rojizo
que adquiere por el óxido de hierro en la mayoría de su
superficie. Su tamaño es casi la mitad del de la Tierra y su
gravedad un 40% menor, lo cual lo hace prácticamente
inhabitable según las últimas investigaciones de la NASA.
Jupiter
El Planeta del Sistema Solar que recibe su nombre por el
Dios Zeus de la mitología griega (Júpiter en mitología
romana) es, precedido por el Sol, el planeta con mayor
cuerpo celeste. Tiene un tamaño de 1300 veces mayor que
la Tierra. Como cuerpo masivo gaseoso, su composición
está formada básicamente de hidrógeno y hielo. Como dato
curioso, es considerado el planeta más antiguo del Sistema
Solar, precediendo al Sol inclusive.
Saturno
Es famoso este planeta del Sistema Solar por su
imponente brillo procedente de sus anillos que rodean al
planeta. Volviendo a Galileo, éste lo avistó por primera
vez en el año 1610. Prácticamente todo el planeta (un
96%) está formado por hidrógeno y el 3% restante de
hielo.
Urano
Este planeta está considerado el primero en ser descubierto mediante un
telescopio. Su composición es muy parecida a la de sus hermanos Saturno y
Júpiter, puesto que está formado por helio e hidrógeno, así como de agua,
amoníaco y metano pero en cantidades mayores. Una peculiaridad de este
planeta del Sistema Solar es su atmósfera, con las temperaturas más bajas de
todo el Sistema, alcanzando la mínima de -224 grados Celsius.
Neptuno
Neptuno fue descubierto hace unos dos siglos por Urbain Le Verrier, John
Couch y Johann Galle, allá por el año 1847. No obstante, algunos
historiadores y astrónomos sostienen que el célebre Galileo Galilei ya
observó este planeta por el año 1612, dato todavía sin confirmar. El planeta
Neptuno está compuesto de roca fundida, agua, metano, hidrógeno, hielo y
amoníaco líquido.