Los virus de la gripe A, B y C son los miembros
más importantes de la familia de los
Orthomyxoviridae. Tan solo los virus de la gripe A
y B provocan una enfermedad significativa en el
ser humano y únicamente el virus de la gripe A es
una zoonosis.
La gripe es una de las
infecciones víricas más
prevalentes y significativas.
Los virus de la gripe son virus respiratorios que provocan
sintomatología respiratoria y los clásicos síntomas gripales de
fiebre, malestar, cefalea y mialgias (dolor por todo el cuerpo).
Estructura y replicación
Los viriones de la gripe son
pleomorfos, esféricos o
tubulares, con un diámetro
variable de 80 a 120 nm.
Los segmentos genómicos del virus
de la gripe A contienen entre 890 y
2.340 bases.
La HA tiene diversas funciones: es la proteína de
unión vírica que se une al ácido sialico de los
receptores de la superficie celular epitelial;
estimula la fusión de la envoltura a la
membrana celular a pH acido, hemaglutina (une
y agrega) eritrocitos humanos, de polio y de
cobaya, y desencadena la respuesta protectora
de anticuerpos neutralizantes.
El virus abandona la célula por gemación de
manera selectiva desde la superficie (vía aérea)
apical como consecuencia de una inserción
preferencial de la HA en esta membrana. El virus
se libera aproximadamente 8 horas después de
la infección.
Patogenia e inmunidad
Inicialmente el virus de la gripe
establece una infección local de las
vías respiratorias superiores.
La liberación preferente del virus en la superficie
apical de las células epiteliales y en el pulmón
facilita su diseminación intercelular ya otros
hospedadores.
La infección por el virus de
la gripe es un inductor
excelente de interferón.
La protección contra las reinfecciones
depende principalmente de la
elaboración de anticuerpos contra
HA, aunque los anticuerpos contra
NA también confieren protección.
Epidemiología
La infecci6n de la gripe se extiende rápidamente a través de las
pequeñas gotitas respiratorias expulsadas al hablar, respirar y
toser. La humedad baja y las temperaturas frescas estabilizan el
virus, y la estrecha proximidad durante los meses de invierno
favorece su propagaci6n. El virus también puede sobrevivir en
las superficies inertes hasta un día.
Las cepas de virus de la gripe A se clasifican en
funci6n de las siguientes características:
I. Tipo (A).
2. Lugar de! primer aislamiento.
3. Pecha del primer aislamiento.
4. Tipo HA y NA.
Enfermedades clínicas
Dependiendo del grado de inmunidad a la cepa
del virus infectante y de otros factores, la
enfermedad puede ser desde asintomática hasta
grave.
Los pacientes con alguna enfermedad cardiaca
respiratoria subyacente, los individuos con alguna
deficiencia inmunitaria (incluso la asociada a la gestación),
los pacientes de edad avanzada y los fumadores son más
propensos a padecer un cuadro grave.
El pródromo va seguido por la aparición súbita de fiebre
elevada, escalofríos, mialgias intensas, pérdida de apetito
y habitualmente una tos no productiva.
El virus de la gripe puede causar directamente una
neumonía, aunque es más frecuente que favorezca una
infección bacteriana secundaria que provoca bronquitis o
neumonía rápidamente progresiva y potencialmente mortal.
El síndrome de Reye es una encefalitis aguda que afecta a
los niños y aparece con posterioridad a diversas infecciones
víricas febriles agudas, como la varicela y los cuadros
provocados por los virus de la gripe A y B.
Diagnóstico de laboratorio
El diagnóstico de la gripe suele basarse en los
síntomas característicos, la estación y la presencia
del virus en la comunidad. Las pruebas de
laboratorio que distinguen el virus de la gripe de
otros virus respiratorios e identifican el subtipo y la
cepa confirman el diagnóstico.
Los virus de la gripe se obtienen de las
secreciones respiratorias obtenidas en las
fases iniciales de la enfermedad.
Las técnicas más rápidas son capaces de detectar e
identificar el genoma o los antígenos del virus de la
gripe. Las pruebas antigénicas rápidas pueden
detectar y distinguir el virus de la gripe A del B en un
plazo inferior a 30 minutos.
Los enzimoinmunoanalisis o los métodos de
inmunofluorescencia se usan para detectar la
presencia de antígeno vírico en células exfoliadas,
secreciones respiratorias o cultivos celulares.
La inmunofluorescencia o la inhibici6n de la
hemadsorci6n o hemaglutinaci6n (inhibicion de la
hemaglutinaci6n) con anticuerpos especificos (v.
cap. 39, fig. 396) tarnbien son capaces de detectar
y diferenciar las distintas cepas del virus de la
gripe.
Tratamiento, prevención y control
Se gastan cientos de millones de dólares en
paracetamol, antihistamínicos y otros
fármacos similares para aliviar los síntomas
de la gripe.
El fármaco antiviral amantadina y su análogo
rimantadina inhiben una fase del proceso de
perdida de la envoltura del virus de la gripe A,
pero no afectan a los virus de la gripe B ni C.
En ausencia de esta enzima, la hemaglutinina del
virus se une al ácido sialico de otras glucoproteínas
y partículas víricas para formar grumos, impidiendo
así la liberación del virus.
Estos fármacos son eficaces para la profilaxis y el
tratamiento durante las primeras 24¬48 horas
tras el inicio de la infecci6n por el virus de la
gripe A.
Muchos paises han creado reservas de
oseltamivir como rnetodo de respuesta
rapida ante un brote y como alternativa a
las vacunas.
La vacuna trivalente se compone de la reorganización de Ios segmentos génicos HA y NA de las cepas
deseadas del virus de la gripe en el interior de un virus donante maestro que se ha adaptado al frío para
que su crecimiento sea 6ptimo a 25 °C.
Thogotovirus
Los thogotovirus poseen seis o siete
segmentos gen6micos y son arbovirus
capaces de infectar al ser humano ya otros
vertebrados.
Se propagan principalmente por garrapatas, pero posiblemente
también por mosquitos. En 2014 un hombre previamente sano
falleci6 de una enfermedad contraída por la picadura de una
garrapata que se parecía a la fiebre exanternatica de las Montañas