Los supuestos que debe contemplar son necesariamente la utilización del Diseño Curricular Base, la estructura organizativa y los recursos pedagógicos del centro, las competencias profesionales del
profesorado y sus opciones respecto a metodologías didácticas particulares.
Sea cual sea la naturaleza esta tarea exige dos pasos: la planificación y distribución de los aprendizajes entre los niveles que conforman un ciclo, y la planificación y temporalización, dentro de cada nivel, de los
aprendizajes correspondientes.
OBJETIVOS Y CONTENIDOS DE NIVEL
El primer paso en la confección de programaciones a partir del Diseño curricular Base consiste en traducir los Objetivos Terminales de Area y los bloques de contenido
correspondientes.
El punto clave de este primer paso reside en distribuir entre los niveles del ciclo los elementos de contenido previamente identificados y secuenciados. Esta distribución se lleva a cabo de tal modo que en el primer
nivel del ciclo se incluyen los elementos mas fundamentales y representativos del contenido.
Lo que se pretende procediendo de este modo es favorecer el aprendizaje significativo de los alumnos
ayudándoles a construir redes o estructuras de significados cada vez mas amplios, ricos, complejos e integrados.
Es necesario tener en cuenta las
características diferenciales de los alumnos
para los que se elabora la programación.
Un nivel puede corresponder a un curso
académico.
PROGRAMACIONES
La temporalización por niveles de los aprendizajes escolares es el punto de partida
inmediato para programar la acción pedagogíca mediante el establecimiento de unidades
didácticas, ordenadas y secuenciadas, en el seno de cada nivel.
Los objetivos de las unidades didácticas son similares en cuanto a su
significado y formulación, a los objetivos de nivel.
El logro de un objetivo de nivel supone a
menudo el logro de varios Objetivos
Didácticos, pues estos últimos implican
normalmente unos contenidos menos
amplios.