Los antibióticos son medicamentos utilizados para
prevenir y tratar las infecciones bacterianas.
La resistencia a los antibióticos se produce cuando las bacterias
mutan en respuesta al uso de estos fármacos.
Alcance del problema
El alcance a sido demasiado llegando a
complicar tratamiento de enfermedades
como la neumonía, la tuberculosis, la
septicemia, la gonorrea o las enfermedades
de transmisión alimentaria, debido a que las
bacterias han mutado y se han vuelto
resistentes a los antibióticos.
Prevención y control
Tomar antibióticos
únicamente cuando los
prescriba un profesional
sanitario certificado.
Prevenir las infecciones lavándose
frecuentemente las manos,
preparando los alimentos en
condiciones higiénicas, evitando el
contacto cercano con enfermos,
adoptando medidas de protección
en las relaciones sexuales y
manteniendo las vacunaciones al día.
REPUESTA DE LA OMS: El plan de acción contiene cinco
objetivos estratégicos:
Mejorar la sensibilización y los
conocimientos en materia de
resistencia a los antimicrobianos.
Reforzar la vigilancia y la
investigación.
Reducir la incidencia de
las infecciones.
Optimizar el uso de
medicamentos
antimicrobianos.
Asegurar que se realicen
inversiones sostenibles en
la lucha contra la
resistencia a los
antimicrobianos.
¿Contribuye al problema el uso de antibióticos en
animales destinados a la producción de alimentos?
Debido a que los animales de consumo humano también son tratados con antibióticos
es muy probable que estos generen bacterias resistentes a antibióticos por lo tanto
podría suceder o darse el caso de adquisición de bacterias resistentes a antibióticos
por medio de consumo de animales con este problema.