mejora nuestra vida y funciona
como alarma natural del cuerpo.
Sin el no podríamos diferenciar entre un entorno peligroso y uno seguro.
Cuenta con muchos receptores situados bajo la piel,
funciona acuerdo la situación de calor, frio, presión o dolor.
La información que recogen los receptores la transmiten al cerebro, la
epidermis toma la información y la transforma en impulsos nerviosos
eléctricos, las fibras nerviosas disponen de vías en la médula espinal
que llegan hasta el cerebro donde se interpretan estos impulsos.