"La diferencia entre una democracia y una dictadura es
que en una democracia primero votas y después recibes
órdenes, en una dictadura no tienes que perder el tiempo
votando" -Charles Bukowski
Tesis
México actualmente vive en una aparente
democracia que en realidad es un
totalitarismo; en muchas ocasiones las
decisiones nos están en poder ni del propio
presidente.
Argumento 3
Durante mucho tiempo se creyó que las dictaduras sólo
eran en regímenes militares como Díaz, Hitler, Somoza,
Batista, Stroessner, Trujillo, Pinochet, que aplastaban a
sus pueblos e imponían “estados de sitio”. Se soslayó que
las dictaduras eran de clase social y no solamente
militares. ¿Se puede olvidar acaso que en el capitalismo el
control de la riqueza se da por generaciones y el
sufrimiento de la pobreza del 80 por ciento de la
población también se da por generaciones? Esto
demuestra que la dictadura económica y política, aunque
sea civil, es una dictadura de clase social y casi ningún
país ha escapado de ella.
Argumento 2
El sistema monárquico desapareció como
dominante desde que se impuso el sistema
capitalista, republicano y democrático con la
revolución francesa a finales del XVIII. Pero la
“democracia” resultó sólo realizar elecciones y
ejercer el gobierno desde tres poderes (el
ejecutivo, el legislativo y el judicial); sólo
sustituyó el poder monárquico de una sola
persona o familia por la dictadura de una
clase social y sus más poderosos
representantes.
Argumento 1
La democracia no ha existido como tal; en la misma
Grecia dominó el sistema esclavista, de esclavos sin
derecho alguno; la llamada “democracia griega” sólo
era en beneficio de los esclavistas. Nuestra
democracia mexicana en lo electoral también resulta
un engaño porque todos los gobiernos han sido
impuestos y han servido a la misma clase social
explotadora minoritaria. Más aún, con la implantación
del imperialismo de los EEUU, éste ha intervenido de
manera abierta en la imposición de sus políticas.
Conclusión
En EEUU, en Inglaterra, en España, en México, se
realizan cada cinco o seis años elecciones y lo único
que ha cambiado es el nombre del parido triunfante:
puede ser Republicano, Demócrata, Laboristas,
Conservador, PP, PSOE, PRI o PAN; pertenecen a las
mismas familias y clase social desde hace muchas
décadas y han ejercido dictaduras de clase. Cada
gobernante, junto a los empresarios, ha acumulado
gigantescas riquezas en nombre de la “democracia y la
libertad” y al mismo tiempo han condenado al 80 por
ciento de los habitantes de sus países a la pobreza y
la marginación. La democracia mal aplicada sólo
beneficia a los más poderosos.