Es un ejercicio de analizar y
valorar razonadamente una
obra .Quien realiza esta
actividad es un critico
literario y normalmente esta
especializado en algun
genero concreto ( poesia,
teatro, etc )
El texto no se explica, es decir, no
se fundamenta en sí mismo; el
texto se descubre, línea a línea, se
disfruta sin preguntas engorrosas,
apenas con breves cómo, cuándo
y por qués.
CRITICA LITERARIA EN
COLOMBIA
Algunos piensan que la historia de la crítica en
Colombia tiene tres hitos cosmopolitas: que empieza
con esa catedral de la lengua que Rufino José Cuervo
erigió en París (El diccionario de construcción y
régimen de la lengua castellana), se vuelve sofisticada
y mundana en Buenos Aires con Baldomero Sanín
Cano (Divagaciones filológicas) y toma la forma de una
sinfonía babilónica en siete idiomas en México D. F. a
través de la bífida lengua de Fernando Vallejo (Logoi).
Como ese lector primario descubrió que
cada texto era diferente, algunos
comparables entre sí, otros no, como
consecuencia de los diversos idiomas,
lenguas, dialectos, etcétera, intentó el
trabajo de traducción.
Cuando los libros, los textos en papiro, antes de la
imprenta, invadieron el planeta, hubo alguien que se
ocupó de leer (cuando la lectura no era masiva y
estaba, por ejemplo, vedada a las mujeres), de releer
y de opinar sobre lo que tenía en sus manos.
Comenzaban, así, las primeras actuaciones de lo que
mucho después se constituyó en crítica literaria.
Año tras año, siglo tras siglo, el hombre y su
escritura fueron evolucionando junto con las
necesidades de la sociedad, que proveían de
materia prima para sus manifestaciones.
Cambiaron hábitos, los libros se apoderaban
de su contexto, de esos cambios; variaron las
creencias, los hombres respondiendo a ellas,
o, revelándose en contra, ¿qué importa?, las
incluían en sus libros, se rompieron las
barreras políticas... corrió la libre expresión...
y la explosión de la literatura fue imparable
Existen dos grandes modelos de crítica literaria:
la que pretende ser objetiva y científica; y la que
reconoce la inevitable subjetividad de su punto
de vista, y con frecuencia incluso la expone
abiertamente: en el fondo, la cuestión que
debería de separar estos modelos es el papel del
gusto, la capacidad de análisis; y aquí es
inevitable la pregunta: ¿es algo superior al
crítico, o podemos controlar su grado de
influencia? Eso se relaciona, a su vez, con una de
las funciones primordiales de la critica en
general: educar (no imponer) el gusto del
público.
dejo en claro que la función de critico
literario no se asume por casualidad, sin
conocer lo que ofrece el mercado nacional
ni desde puntos de vista personales, sino
desde aquello que se conoce como
libertad de interpretación