El primer concepto que dio la American Marketing Association (AMA,
1960) “es la realización de actividades empresariales que dirigen el flujo
de bienes y servicios del productor al consumidor o usuario”.
El concepto es perfeccionado cuando:
Kotler (1980) “es la actividad humana dirigida a
satisfacer necesidades y deseos a través del proceso de
intercambio”.
Lambin (1991) define“el proceso social, orientado hacia la satisfacción
de las necesidades y deseos de individuos y organizaciones, para la
creación y el intercambio voluntario y competitivo de productos y
servicios generadores de utilidades”.
Santesmases (1993) precisa “un modo de concebir y ejecutar la relación de
intercambio con la finalidad de que sea satisfactoria a las partes que
intervienen y a la sociedad mediante el desarrollo, valoración, distribución y
promoción por una de las partes de los bienes, servicios o ideas que la otra
parte necesita”.
Con el objetivo de:
Captar
El centro del beneficio es el cliente y no el producto o marca; atraer nuevos clientes es percibido
como un objetivo intermedio. Mantener y desarrollar el stock de clientes existentes es el objetivo
principal para crear una relación a largo plazo mutuamente rentable. Lambin (2002)
Fidelizar
Las compañías construyen relaciones con los clientes al ofrecerles valor y satisfacción. Se benefician
con las ventas repetidas y con las buenas recomendaciones que resulten en su incremento, de la
participación en el mercado y de las utilidades. Los costos bajan porque es más barato servir a los
clientes actuales que atraer nuevos. (Muñoz, 2002).
Posicionar
posicionar nuestra marca en
la mente de nuestro público
objetivo, asociándola a unos
valores compartidos y
estableciendo un vínculo
emocional.