A inicios de la década de los años 90, con
la introducción de nuevas facilidades de
interconexión y herramientas gráficas
simples para el uso de la red, se inició el
auge que actualmente le conocemos al
Internet. Este crecimiento masivo trajo
consigo el surgimiento de un nuevo perfil
de usuarios, en su mayoría de personas
comunes no ligadas a los sectores
académicos, científicos y
gubernamentales.2
Esto ponía en cuestionamiento la
subvención del gobierno estadounidense al
sostenimiento y la administración de la red,
así como la prohibición existente al uso
comercial del Internet. Los hechos se
sucedieron rápidamente y para 1993 ya se
había levantado la prohibición al uso
comercial del Internet y definido la
transición hacia un modelo de
administración no gubernamental que
permitiese, a su vez, la integración de redes
y proveedores de acceso privados.
El 30 de abril de 1993 la Web entró al
dominio público, ya que el CERN entregó
las tecnologías de forma gratuita para
que cualquiera pudiera utilizarlas