Se definen, describen y caracterizan un grupo de los principales motores de búsqueda
que operan en Internet. Se analizan los métodos reconocidos para su evaluación y
selección, así como se ofrecen algunos consejos para perfeccionar el proceso de
búsqueda con el fin de mejorar sus resultados. Se exponen, de forma general, sus
semejanzas y diferencias, ventajas y desventajas y se analizan sus tendencias actuales
de uso. Desde hace muchos años, ya en la era moderna, cuando alguien necesitaba
información de carácter científico, comercial o de entretenimiento solía encaminarse
hacia una biblioteca pública, especializada o académica, en la que un bibliotecario o
referencista lo orientaba; él podía también consultar los tradicionales catálogos de
autor, título, materia u otro que describiera los documentos existentes.
Métodos
La búsqueda en el web mediante Google.com, por
términos como "motores de búsqueda" y "search
engines", devolvió entre los resultados más
importantes sitios como:
http://www.allsearchengines.com y
http://www.searchenginewatch.com, ambos con
una gran cantidad de enlaces importantes a
trabajos sobre estos temas. Producto de una
lectura crítica de la bibliografía consultada, se
obtuvo un grupo de conclusiones importantes en
cuanto a definiciones y tipos de los buscadores,
funcionamiento, estrategias para un uso más
efectivo, ventajas y desventajas.
Buscadores en
Internet. Conceptos,
clasificación y
características
Muchos son los nombres que han recibido los buscadores de
acuerdo con su estructura y funcionamiento. Algunos autores los
clasifican en índices, robots y metabuscadores,2 otros los agrupan
en directorios y buscadores,3 o bien en índices y motores de
búsqueda.4,5 Todos estos términos tienen su equivalente en
inglés, sin embargo, en esta lengua además de "index", "meta-
search engine" "directory" y "search engine", para los 2 últimos
aparecen en la literatura sinónimos como "crawler o spider" y
"human-powered" respectivamente. Veamos a continuación
algunas definiciones.
En el artículo "Buscadores: Los puntos de partida en la
red"2 se plantea que se dividen básicamente en índices,
robots y metabuscadores. Aquí se consideran los índices
como los pioneros en Internet, ellos funcionan mediante
la incorporación constante de nuevas páginas a su base de
datos, generalmente disponen de un evaluador que
minimiza el número de páginas que ingresan al sistema y
asegura su calidad; los robots (llamados por la gran
mayoría motores de búsqueda) disponen de programas
"arañas" que recorren la red e incluyen de forma
automática "todo cuanto encuentran", esto genera
grandes dificultades para los navegantes al momento de
seleccionar los recursos, sobre todo en el caso de
búsquedas con un alto recobrado; por último, los
metabuscadores se limitan a redirigir la pregunta que
reciben a varios buscadores a la vez, y según el estado de
opinión prevaleciente, suele ser difícil pero recomendable
el trabajo con ellos, cuando no se encuentra información
en los índices y motores.
La seguridad es un aspecto creo que muy importante en el
uso de nuestros equipos y a la que, por desconocimiento o
pereza, etc., no siempre se le presta la atención adecuada.
El nivel de seguridad asociado a un sistema corresponde al
nivel de seguridad de su eslabón más débil, y el eslabón
más débil de un sistema informático es casi siempre el
usuario. Así que si queremos movernos en Internet con
seguridad, deberemos dejar la pereza de lado y ser algo
más protagonistas y conocedores del sistema informático
que usamos.
Antivirus:
No caigas en la falsa sensación de seguridad que pueda
proporcionarte. Los antivirus sólo son efectivos contra los virus
ya conocidos, no contra los nuevos que vayan apareciendo,
hasta que éstos hayan sido detectados, analizados y añadidos a
la base de datos del programa en sucesivas actualizaciones. Por
lo tanto, si tienes antivirus es necesario actualizarlo con
frecuencia. Afortunadamente los antivirus ya permiten que
deleguemos en ellos la tarea de descargar las actualizaciones, y
si son diarias mejor que mejor.
Firewalls
Tampoco esta protección es perfecta; de hecho,
los cortafuegos pueden esquivarse en ocasiones,
pero es un factor más que puede ayudarnos a
determinar si tenemos algún tipo de software
malicioso en el ordenador. Si de pronto el
cortafuegos nos avisa de que un programa quiere
conectarse a un puerto determinado de otro
ordenador y no conocemos ese programa, puede
que estemos ante el intento de un troyano recién
instalado de comunicarse con otros ordenadores.
Nunca guardes tus
claves en el propio
ordenador
Cada vez son más los sitios de Internet
donde se requiere tener una cuenta,
con nombre de usuario y clave. Desde el
correo electrónico y los bancos al
messenger, las redes sociales e incluso
algunos foros que exigen identificarse
antes de poder participar en ellos. En
consecuencia, el número de claves a
recordar se va haciendo para muchas
personas casi inmanejable. No es
necesario ser una persona de avanzada
edad para tener ya problemas a la hora
de memorizar multitud de claves.
En consecuencia, muchas personas optan por apuntar las
claves difíciles de recordar, si no todas. No está de más
insistir en que, en ese caso, deben apuntarse en papel y no
dejar nunca ese “libro de claves” a la vista o en las
cercanías del ordenador. Por supuesto, nunca jamás
deben almacenarse en un fichero en el propio ordenador.
En caso de que perdamos el control del mismo debido a
algún virus o troyano o bien si nos roban el equipo o lo
perdemos, habremos dado a la persona que lo tenga la
posibilidad de acceder a todos nuestros datos
(posiblemente hasta los bancarios)
Compras por Internet:
Ante el crecimiento del comercio electrónico, cada vez
nos enfrentamos más al dilema de pagar con tarjeta.
Una opción a tener muy en cuenta es la de abrirnos
una cuenta bancaria secundaria y específica para las
compras por la Red con una tarjeta de débito asociada
a ella. De ese modo podemos mantener un saldo bajo
pero suficiente para las compras que solemos hacer.
Con cierta periodicidad, o poco después de realizar la
compra o poco antes de la siguiente, si es que podemos
planificarla, bastará con “recargar” la misma con una
cantidad similar a la gastada para mantener el nivel de
saldo de esa cuenta.
Si realizamos compras por Internet, seguramente
también usaremos la banca electrónica con lo cual
bastarán unos cuantos clicks para transferir esa
cantidad desde nuestra cuenta corriente principal.
Esto tiene una ventaja añadida, ya que ayuda a
controlar nuestros gastos. Una compra por Internet
es fácil y rápida, y muchas veces no somos
conscientes realmente de cuánto hemos gastado.
Mediante este sistema, nos obligamos de alguna
manera a fijarnos también en lo que nos hemos
gastado y si superamos el presupuesto que nos
podamos permitir en cada momento.
10 Consejos que los menores deben
conocer para no caer en la Red.
En el especial caso de los menores y, además de los dispositivos
que la tecnología pueda ofrecer, para evitar que sean víctimas de
la Red, debe insistirse en la “precaución” como escudo por
excelencia: evitar que se muestren sin límites en Internet, que
tengan en cuenta el alcance que puede tener cualquier tipo de
información que sea insertada en Internet. Como precauciones
generales, debe insistirse en la “educación”.
1.- Internet retiene
todo rastro de
tráfico, la
información que
transporta puede ser
rastreada.
2.- Internet es un
sistema de
comunicación
utilizado por
personas:
precaución y
respeto por quién
está al otro lado.
3.- Internet se parece a la
vida física más de lo que
creemos, desconfía de
aquello que te haría
desconfiar en la calle
(por ejemplo, la imagen
de una tienda o la
personalidad de un
desconocido).
4.- Internet es información,
para saber si es o no útil, si
es o no verdad, siempre
debe ser contrastada.
Solicita consejo a un adulto
de confianza antes de
actuar.
5.- Internet dispone de todo lo
que insertamos en sus redes,
debemos evitar ofrecerle
demasiada información sobre
nosotros mismos, y ser
conscientes de lo fácil que es
perder el control sobre ello.
6.- Internet no es ilegal,
pero puede ser el
escaparate de la comisión
de un delito, estate atento a
lo que te llega a través de
sus redes y, desconfiar de lo
que tenga un origen
incierto.
7.- Internet es paralela a
la vida real, no ajena, lo
que en ella ocurre suele
tener un reflejo directo
en el ámbito personal y
físico de los implicados.
8.- Internet permite manejar
dinero sin necesidad de tocarlo,
las transacciones que realices, que
sean con permiso seguro del
banco en que confías. Desconfía
de los envíos de dinero que no
pasan por una entidad bancaria o
una administración pública
estatal.
9.- Internet pone a nuestra
disposición más datos de los
que podemos asumir y, de la
misma forma que ocurre en la
vida real, necesitamos filtrar
aquello que sobra para un
desarrollo personal pleno, ya
sea con el sentido común, ya lo
sea con ayuda de dispositivos
técnicos de filtrado.
10.- Existen leyes que castigan
las actividades ilícitas en
Internet, y también existen leyes
que protegen a sus usuarios de
una mala utilización de Internet,
especialmente cuando afecta a
sus derechos fundamentales
(intimidad, secreto de las
comunicaciones, datos
personales, libertad de
expresión, etc.). Si eres víctima
denúncielo.