La Acción Sobre El Mundo Exterior:
la actividad sensoriomotriz
Organización y movimiento
Actividad y
objetivización.
La sensibilidad a la que le compete guiar el movimiento,
precisa de éste para definirse, especificarse, adquirir
una significación objetiva. Es preciso que, tras dejar de
ser puramente fortuitas y pasivas, hayan podido ser
mantenidas, reproducidas, modificadas por el propio
sujeto. Hay dos direcciones posibles, los reflejos de
defensa y las reacciones afectivas.
Sensibilidad orgánica
Funciones digestivas.
Excitaciones laberínticas.
Evolución de la sensibilidad al
medio
Las manos y el contacto.
sus manos instrumento predilecto
para palparse a sí mismo.
Los labios y la lengua.
El instrumento de conexiones sensoriales que brindarán
a la vida mental valiosas posibilidades.
Los sonidos.
Los movimientos cuya sede reside en la boca tienen otros efectos de los
que el niño acabará por darse cuenta.
Adquisiciones fonéticas
Entre los fonemas que emite el niño con tanta
espontaneidad, los hay que no le serán de ninguna utilidad
para la lengua que hablará.
Datos visuales.
Entre la impresiones visuales y aquellas que resultan de la acción sobre los
objetos circundantes se establecen conexiones.
Integración de los datos
sensoriales
La vista juega un papel muy importante por la actividad propia del sujeto que consiste en la impresión
de esfuerzo muscular.
El primer contacto del niño con las cosas es puramente afectivo y las diversas
impresiones que experimenta se van añadiendo a sus impresiones orgánicas de
frio o de calor.
Al nacer carecen de coordinaciones
fundamentales.
Su primer aprendizaje motor es de equilibrio y gradualmente
llega a ser capaz de combinar los movimientos de diferentes
segmentos corporales
Acción sobre el mundo
exterior
El
automatismo
Electividad progresiva
Es anular bloques preexistentes de movimientos con objeto de hacer uso
exclusivamente de las combinaciones requeridas por la acción en curso de
ejecución. Solo mediante una mayor capacidad de elección en el juego de los
músculos llegan a ser posibles acciones más especializadas. Tanto si los
automatismos son naturales, caso de la marcha o de la aprehensión, como si
responden a técnicas aprendidas, caso de la danza la escritura, la
interpretación del pianista, su agilidad siempre va unida a la capacidad de
suprimir todas las contracciones parasitarias.
Fusión con el instrumento
El pianista, en el extremo de tocar incorpora, por así decir, el piano a su propia
persona, de modo que el instrumento no ofrece a sus dedos la resistencia de un
cuerpo extraño. A través del automatismo el individuo se confunde con las cosas
sobre las que opera.
Construcción del mundo exterior
De esta forma de actividad se desprende otra que tenderá a resolver la indivisión inicial
entre sujeto y objeto.
Participación en el objeto
La reacción en presencia de un objeto codiciado, al principio es,
cualesquiera que sean los obstáculos, un intento global y directo de
apropiarse de ese objeto no de suprimir esos obstáculos. El niño no
puede reprimir sus gestos de prensión, ni siquiera cuando se halla
separado del objeto con un espejo. Al no poder moverlo a veces se
mueve él mismo en la dirección en la que quisiera verlo venir. A un nivel
algo más elevado, parece como si el niño creyera en la posibilidad de
traspasar sus intenciones a las cosas a través de sus gestos o, al menos,
de introducir en las cosas una propiedad que es el efecto del propio
gesto.
Transferencia al objeto de la actividad
del sujeto
La fuerza que les aplica, la imagina desigualmente distribuida según la imagen
subjetiva que se hace de sus efectos. Ocurre que todavía no posee una intuición
suficientemente clara de las relaciones espaciales, al carecer de ella, no es capaz de
desprender las cosas de sí mismo. Para alcanzar un objeto demasiado alto subirá a
una silla muy alejada de él.
La acción no integrada al espacio
A esa impotencia va unida la de imaginar las condiciones, los efectos, la trayectoria de
un movimiento. Todo le parece posible. No es capaz de imaginar una posición o un
trayecto separado del perímetro que delimita la extensión en la que él opera o de lo que
ya se encuentra situado en el perímetro.
Dimensiones y orientaciones en el espacio
Las dimensiones de las cosas, es totalmente incierto para el niño. Intenta introducir en el
aro ganchos de radio excesivo. Otras veces sustituye la silla, desde la que no podía alcanzar
un objeto demasiado alto, por un banco más largo pero más bajo.
Maduración funcional y
estructura de las cosas.
De modo que la acción sobre el mundo exterior no sólo está hecha de
sensaciones y de movimientos. Un niño no saca provecho de los
ejemplos, no comprende las sugerencias, no se acuerda de los logros
ocasionales que corresponden a tareas que rebasan su edad.