Dolor abdominal intenso, que irradia
hacia los hombros y la espalda en
forma de cinturón; la presencia de
vómitos, fiebre y, en algunos casos,
derrame pleural, con dificultad para
respirar. Si el cuadro se agrava, pueden
aparecer otros síntomas como
disminución de la tensión arterial,
insuficiencia respiratoria, renal, o
cardiaca, alteraciones mentales,
etcétera.
CAUSAS
En el 60 u 80% de los casos de
pancreatitis aguda, las causas más
frecuentes son los cálculos biliares y el
abuso de alcohol. Esta afección es
frecuente en los pacientes con síndrome
de inmunodeficiencia adquirida (SIDA) y
en los que tienen hiperparatiroidismo e
hipercalcemia. También se ha
observado la aparición de este trastorno
en el periodo postoperatorio tras la
cirugía abdominal y torácica, y en
personas con excesivos niveles de grasa
en la sangre (hiperlipemia). Otras
causas menos frecuentes de
pancreatitis son el consumo de ciertos
medicamentos, traumatismos o causas
genéticas.
El diagnóstico de la pancreatitis aguda se puede
establecer en base al cuadro clínico descrito por el
paciente, y se confirma por el aumento de las
concentraciones de la enzima amilasa en la
sangre. La tomografía computarizada potenciada
con contraste (CPRE) es la mejor prueba no
invasiva para demostrar los cambios en la forma
del páncreas que se asocian con esta enfermedad.
La CPRE es útil en casos de pancreatitis traumática
y de litiasis grave, aunque existen casos de
pancreatitis aguda en los que el páncreas presenta
un aspecto normal en la exploración. La
radiografía abdominal puede revelar
calcificaciones pancreáticas, mientras que la
ecografía es útil para comprobar la presencia de
páncreas agrandado, o para identificar un
pseudoquiste lleno de líquido. La CPRE es la
prueba radiológica para diagnosticar los cambios
precoces de los conductos pancreáticos.
TRATAMIENTO
El tratamiento de la pancreatitis aguda se
basa en la administración intensiva de
líquidos intravenosos y la suspensión de la
ingesta oral para dar reposo al páncreas.
Es necesario el empleo de analgésicos para
controlar el dolor intenso de la región
abdominal, y se puede colocar aspiración
nasogástrica si el paciente presenta
náuseas o vómitos. En caso de que la
pancreatitis esté originada por la
presencia de piedras en la vía biliar, está
indicada la eliminación endoscópica de los
cálculos biliares que causan la obstrucción
durante las primeras 72 horas siguientes
al comienzo de los síntomas. Un paciente
con pancreatitis aguda debe ser
hospitalizado, ya que es necesario
controlar su evolución