Desde finales del siglo XIX hasta
1929, el sector cafetero se había
convertido en el más importante
de la economía, lo cual influyó en
la prosperidad económica y la
estabilidad política.
CUBA
VENEZUELA
ECUADOR
Durante la primera mitad del siglo, el país se enfrentó a
diferentes golpes de Estado que impidieron la
consolidación de un gobierno democrático.
El comienzo del siglo XX se caracterizó por
continuas luchas y rebeliones que culminaron
con la victoria de Juan Vicente Gómez en 1908,
Esto a largo plazo fue contraproducente, ya que
la economía del país depende en la actualidad
única y exclusivamente de la explotación y
comercialización de este combustible y lo
convierte en un país dependiente de otras
economías.
Pese a que Estados Unidos reconoció la
independencia de Cuba en 1902, este seguía
influyendo en sus asuntos económicos a través de la
Enmienda Platt. Este fue un instrumento legal,
insertado en la Carta Constitucional de Cuba, que
autorizaba a los Estados Unidos a intervenir en ese
país en cualquier momento en el que los intereses
mutuos de ambos países se vieran amenazados.
NICARAGUA
PERU
ARGENTINA
A inicios del siglo XX se vivía un periodo de
prosperidad y crecimiento económico,
gracias a la expansión de la frontera
agrícola. Por otro lado, el desarrollo del
sistema ferroviario, los puertos y otras obras
públicas en las ciudades atrajo una gran
cantidad de inmigrantes provenientes de
Italia, España y de los antiguos impe rios de
Rusia, Austro-Hungría y Turco-Otomano.
A comienzos del siglo XX, Perú
estuvo gobernado por el general
Augusto Leguía, quien encabezó
una dictadura que se extendió
hasta 1929, año en el cual el país se
enfrentó al descontento popular
producido por la crisis económica.
Augusto César Sandino, quien encabezó una
rebelión en contra del gobierno, presionó el
retiro de los Estados Unidos de Nicaragua en
1933 y planteó una serie de reformas sociales.
Sin embargo, Sandino fue asesinado en 1934
luego de firmar un pacto de paz con el
gobierno, después de lo cual, el general
Anastasio Somoza asumió el poder con el
respaldo de las élites locales, y con el apoyo
financiero y militar del gobierno de los
Estados Unidos.