Con el sistema nervioso se puede tener una reacción a nuestro entorno que se puede entender por
irritabilidad.
Se forma por el sistema nervioso central que es el encéfalo y la médula espinal lo cuál manda la
información de los medios externos a los músculos y glándulas y el sistema nervioso periférico el cuál se
conforma por nervios que enlazan el sistema nervioso central y periférico.
El sistema nervioso central enlaza con los tejidos del cuerpo.
El sistema periférico se divide en somático que se encarga de los sentidos y el autónomo controla las funciones involuntarias.
El sistema reproductivo es el que se encarga de la
reproducción de los seres vivos y es el un conjunto de
órganos encargados de esta función y se requieren 2
células sexuales.
Se generan impulsos nerviosos en el hipotálamo, la
hipófisis que a su vez le mandan esos impulsos a las
gónadas, donde se generan los estrógenos, progesterona
y andrógenos.
Todos esto se genera por la sinapsis, la cual genera
estímulos o los puede inhibir y al darse estos cambios
se liberan neurotransmisores para poder generar los
estímulos.
La vinculación entre el sistema reproductivo y el nervioso
se da desde las conexiones que tiene el sistema
nervioso central y el periférico ya que se generan
externos e internos.
El sistema nervioso indica a las glándulas segregar
hormonas las cuales pasan por el torrente sanguíneo y
activa la comunicación entre neurotransmisores.
El sistema nervioso central genera respuestas
fisiológicas y se generan en el cuerpo de manera
autónoma a través del sistema periférico para el acto
sexual.
Así los 2 juegan un papel importante para la
reproducción humana, ya que al copular se pueden
liberar los espermatozoides en el ovulo, llegando a una
fecundación y creando un cigoto para la reproducción
humana.