Surgió al interior de la iglesia católica,
con la doble finalidad de contener el
avance del protestantismo, y al mismos
tiempo realizar una crítica al interior de
la propia institución. Desde antes de la
reforma protestante había al interior de
la iglesia, movimientos para renombrar
la institución, y estas críticas generaron
una ruptura con el Papa.
La iglesia tomo medidas para organizar su
estructura interna, bajo la dirección de los
Papas reformadores. Las fianzas de las iglesias
fueron reorganizadas, exigiendo cumplimiento
de posiciones de la iglesia por parte de
sacerdotes destacados por la integridad moral y
adopción política intolerante con los sacerdotes
de conducta cuestionable.
El Concilio De Trento
Entre 1545 y 1563, los cardenales de la iglesia
católica, bajo la dirección del Papa, se
reunieron en la ciudad de Trento, Italia, para
discutir las reformas. El concilio de Trento
reafirmó la doctrina católica y la organización
de la iglesia. Denegó cambios doctrinales
realizados por los reformistas, confirmó los 7
sacramento, el culto a la Virgen María y los
santos. Reafirmó que un buen católico es
juzgado por su fe y las obras que hace. Y
confirmó que las fuentes de la doctrina
católica son la tradición de la iglesia y la biblia.