Obras de comunicación que ayudaron a construir los
negros afroantillanos
Ferrocarril
En el siglo XIX, nueva era de la historia Panameña dio comienzo cuando la
capital norteamericana poco a poco toma control del país, importando mano de
obra extranjera para la construcción del ferrocarril.
La ruta se extiende 48 millas (77 km) a través del istmo de Panamá, desde Colón a la ciudad de Panamá (por medio
de Gatún, Bujio, Barbacoas, Matachin, y Summit). Al abrir sus puertas en 1855 se le denominó "ferrocarril
interoceánico", que más tarde fue descrito como el primer ferrocarril transcontinental.
Canal de Panamá
El aporte de los afroantillanos a la construcción del Canal, ya en manos de Estados Unidos fue crucial.
La Comisión del Canal Ístmico empleó entre 1904 y 1914 a 45,107 personas procedentes
principalmente de las Antillas, así como de Europa y América. Durante ese período se emplearon a
31,071 afroantillanos.
Hoy por hoy el Canal de Panamá, además de poseer un valor estratégico desde el
punto de vista económico y comercial, es una prueba elocuente del progreso
humano en el campo de la tecnología. Se trata sin duda alguna, de una de las obras
de Ingeniera más grande a lo largo del desarrollo mismo de la humanidad.
Igualmente el Canal ha permitido, con todas las limitaciones propias de la época de su
construcción, la convergencia de diferentes razas y culturas, generando un país
multiétnico y pluricultural, constituyéndose en un ejemplo de convivencia intercultural,
que da testimonios de las posibilidades de comprensión y tolerancia que encierra
dialécticamente la condición humana.