Propagación del Sonido
Las vibraciones del sonido viajan a través de medio sólido, gaseoso o líquido. Sin embargo, los sólidos o líquidos son los más efectivos. Las vibraciones de la cuerda viajan mejor a través de ella, que es un medio sólido, a tan solo a través del aire. Esto es debido a que las moléculas de una cuerda están más unidas y eso permite que transporten mejor el sonido. Si el hilo no está tenso, la vibración será muy pequeña, se disipa y no llega hasta el otro vaso. Por el contrario, si el hilo está tenso se transmite la vibración (el sonido) hasta el vaso del otro extremo, reproduciéndose en él el sonido inicial.
Como el sonido viaja mejor por medios sólidos que por el aire, permite que las personas puedan comunicarse a través de larga distancia y por muchos años es como han funcionado los teléfonos tradicionales. Un cuerpo en oscilación pone en movimiento a las moléculas de aire (del medio) que lo rodean. Éstas, a su vez, transmiten ese movimiento a las moléculas vecinas y así sucesivamente. Cada molécula de aire entra en oscilación en torno a su punto de reposo. Es decir, el desplazamiento que sufre cada molécula es pequeño. Pero el movimiento se propaga a través del medio. Actividad 3: Concluyendo la sesión A modo de registro pídele a los estudiantes que completen en sus bitácoras las siguiente tabla de datos: Tipo de teléfono Longitud de la cuerda Intensidad del sonido (Alta- media-baja) Vasos plásticos Vasos de cartón Vasos de icopor Finalmente se les pide a los estudiantes que ubiquen sus teléfonos de cuerda, clasificándolos de acuerdo con su calidad de sonido y longitud (mayor eficiencia), luego, el formador permitirá que los estudiantes socialicen la experiencia, escuchará a los estudiantes y encaminará las conclusiones que estos dan hacia la pregunta inicial de la sesión. A partir de estas respuestas se concluirá la importancia del sonido y del análisis y compresión de su comportamiento en los fenómenos cotidianos. Recursos - https://www.youtube.com/watch?v=W7Z5S3wPKEQ ¿Cómo viaja el
Entre la fuente sonora (el cuerpo en oscilación) y el receptor (el ser humano) tenemos entonces una transmisión de energía pero no un traslado de materia. No son las moléculas de aire que rodean al cuerpo en oscilación las que hacen entrar en movimiento al tímpano, sino las que están junto al mismo, que fueron puestas en movimiento a medida que la onda se fue propagando en el medio.
El (pequeño) desplazamiento (oscilatorio) que sufren las distintas moléculas de aire genera zonas en las que hay una mayor concentración de moléculas (mayor densidad), zonas de condensación, y zonas en las que hay una menor concentración de moléculas (menor densidad), zonas de rarefacción. Esas zonas de mayor o menor densidad generan una variación alterna en la presión estática del aire (la presión del aire en ausencia de sonido). Es lo que se conoce como presión sonora.