Las teoría humanista surge como rechazo a las psicologías dominantes de su época , el
psicoanálisis de Freud y la Psicología Conductual de B. F. Skinner, aparece el humanismo
durante la primera mitad del siglo XX.
La psicología humanista como "tercera fuerza" Propone un método de conocimiento humanista, en el
que se rechaza el absolutismo y hay una preferencia por la flexibilidad frente a la exactitud
racionalista.
Para el enfoque humanista lo mas importante del ser humano se
obtendrá centrándose en los fenómenos puramente humanos;
como el amor, la creatividad o la angustia.
El humanismo ve a la persona desde una visión holística y positiva,
donde el centro de atención es la experiencia subjetiva del sujeto.
La psicología humanista es una escuela que pone de
relieve la experiencia no verbal y los estados alterados de conciencia como medio de
realizar el pleno potencial humano.
GORDON ALLPORT
Es originario de la ciudad de Montezuma, en el
estado de Indiana en Estados Unidos. Nació el 11 de
noviembre de 1897 y murió el 9 de octubre de 1967
en Cambridge, Massachusetts.
Gordon Allport ha sido reconocido por su trabajo en el campo de la psicología de
la personalidad, la cual se instituyó como disciplina psicológica autónoma desde
1920. En su obra, este psicólogo se encarga de poner énfasis en lo singular del
comportamiento humano individual.
Allport pensaba que el estudio de la personalidad solo podía emprenderse
desde un punto de vista empírico.
Allport propone en su teoría la distinción entre rasgos individuales y rasgos
comunes. Los primeros son aquellos rasgos que son aplicables a todo un grupo
de personas que comparten una misma cultura, una lengua o un origen étnico.
Y los segundos son los rasgos que forman un conjunto de disposiciones
personales basadas en las experiencias individuales.
Allport también reconoce la existencia de los rasgos comunes dentro de
cualquier cultura.
El autor clasifica los rasgos individuales en tres tipos: cardinales,
centrales y secundarios. Los rasgos cardinales son los que dominan y
moldean el comportamiento de cada individuo.
Cuando se describe a una persona se suelen usar palabras que
refieren a rasgos centrales como tonto, listo, tímido, salvaje,
tímido, chismoso, etc. Según la observación de Allport, la mayoría
de los individuos tienen entre cinco y diez de estos rasgos.
El caso de los rasgos secundarios es diferente. Se trata de aquellos que no son
tan obvios porque se manifiestan en menor medida. Además son menos
importantes al momento de definir la personalidad de un individuo en
particular. Por lo general tienen menor influencia en la vida de las personas,
aunque están relacionados con los gustos personales y las creencias.
ABRAHAM MASLOW
Abraham Maslow era un psicólogo estadounidense que nació en
Brooklyn (Nueva York) el 1 de abril de 1908. Sus progenitores
eran judíos no ortodoxos de Rusia que llegaron a la tierra de las
oportunidades con la esperanza de lograr un mejor futuro para
sus hijos.
Maslow, una de las figuras más conocidas de la psicología humanista, comparte
con otros psicólogos humanistas la propuesta de un sistema holístico de modelos
abierto a la variedad de la experiencia humana
Maslow se asocia al concepto de autorrealización, porque en su teoría habla de las
necesidades que tenemos las personas de desarrollarnos, de buscar nuestro máximo
potencial. Y es que, según éste, las personas tienen un deseo innato para
autorrealizarse, para ser lo que quieran ser, y tienen la capacidad para
perseguir sus objetivos de manera autónoma y libre.
Así pues, las cinco categorías de necesidades de la Pirámide de Maslow son: fisiológicas,
de seguridad, de afiliación, de reconocimiento y de autorrealización
En la zona inferior podemos encontrar las necesidades más básicas para la vida,
y, a medida que subimos escalones, iremos encontrándonos con otro tipo de
comportamientos menos necesarios hasta llegar a la punta, donde se encuentra
la famosa autorrealización a la que todo ser humano aspira llegar algún día, y con
ello, a la felicidad plena.
El término metamotivación fue el término acuñado por Maslow para así describir a las personas que
exploran para alcanzar el máximo del potencian humano. Esta definición es asignada por naturaleza a
las personas pertenecientes a este último escalón de la pirámide.