Un tratado de libre comercio
(TLC) es un acuerdo comercial
que firman dos o más países
para acordar la concesión de
preferencias arancelarias
mutuas y la reducción de
barreras no arancelarias al
comercio de bienes y servicios.
¿Por Qué Convienen Los
Tratados De Libre
Comercio?
Estos acuerdos comerciales internacionales, aportan a un país,
como en este caso Colombia, la ventaja de que sus empresarios
puedan vender sus productos y servicios en el exterior en
mejores condiciones, sin pagar impuestos (aranceles) y sin estar
sometidos a otro tipo de barreras, algo que sí hay que costear en
caso de no haber estos tratados.
VENTAJAS
Genera codependencia.
Las naciones que
comercian libremente
pasan a depender la
una de la otra y a
estrechar lazos
comerciales y
diplomáticos, yendo
así en contra de la
aparición de las
guerras.
Promueve la ventaja comparativa.
Esto es, los países tienden a
especializarse en los bienes
que son más eficaces
produciendo y exportando,
pudiendo así importar los
bienes en que no son tan
eficientes a buen precio
relativo. Esto significaría una
mejora en la calidad de vida
del país.
No distorsiona el comercio.
Permite el surgimiento
de dinámicas
comerciales
internacionales libres de
aranceles y otros
mecanismos que
interfieren en su
dinámica “natural”.
Permite el crecimiento regional.
Enriquece a las regiones
que comercian
libremente entre sí, en
oposición al mercado
internacional ordinario.
DESVENTAJAS
Favorece a los poderosos.
Los países comercialmente
más robustos pueden
beneficiarse de la no
intervención estatal en la
balanza comercial exterior,
inundando los mercados
locales ya que la producción
nacional no logra competir
en igualdad de términos.
Genera cambios vertiginosos.
Sobre todo en las formas de
vida y de trabajo de los
trabajadores, lo cual puede
resultar en crisis futuras e
imprevisibles.
No beneficia a los trabajadores.
En los casos de no ir
acompañado de un
movimiento libre de
trabajadores.
Migra el empleo.
Sobre todo cuando se
trata de naciones más
desarrolladas explotando
a naciones menores, las
industrias y los comercios
tienden a mudarse hacia
donde haya condiciones
más favorables y ello a
menudo destruye el
empleo.