El sexo y sus efectos quizá no
sean fáciles de descifrar; su
represión, en cambio, así
restituida, es fácilmente
analizable.
Si el sexo está
reprimido, se está
ante una represión.
El punto importante y que
hace la diferencia es el
hablar libremente de sexo.
LA HIPÓTESIS REPRESIVA
Siglo XVII: sería el comienzo de
una edad de represión.
Se ha tenido una multiplicación de
discursos sobre el sexo. Confesando sus
afinidades sexuales. Dominio desde el
pastoral.
Nace hacia el siglo XVIII una
incitación política,
económica y técnica a
hablar del sexo.
SCIENTIA SEXUALIS
Con las recientes instituciones de
salud pública; pretendía asegurar
el vigor físico y la limpieza moral
del cuerpo social.
Lo importante es que el sexo no haya
sido únicamente una cuestión de
sensación y de placer, de ley o de
interdicción, sino también de verdad y
de falsedad.
Aveu, garantía de condición y
estatuto, de identidad y de valor
acordado a alguien por otro.
La puesta en discurso del sexo, de la
que más arriba se hablaba, la
diseminación y el refuerzo de la
disparidad sexual.
La causalidad en el sujeto, el inconsciente
del sujeto, la verdad del sujeto en el otro
que sabe, el saber en el otro de lo que el
sujeto no sabe, todo eso halló campo
propicio para desplegarse en el discurso
del sexo.
EL DISPOSITIVO DE
SEXUALIDAD
Que el sexo no se encuentre
reprimido, se conoce a una
energía rebelde a la que se le
debe domar.
Las apuestas de las investigaciones
consisten en ir menos hacia la reoría
analítica del poder. La definición de
dominio.
Liberación del poder: relación
negativa entre poder y sexo.
Instancia de la regla. Ciclo
prohibido, lógica de la censura.
Unidad de dispositivo.
Pax et justitia: la paz como
prohibición de las guerras
feudales, justicia para
suspender arreglo de
litigios privados.
DERECHO DE MUERTE Y
PODER SOBRE LA VIDA
El derecho de vida y muerte tal como se
formula en los teóricos clásicos ya es
una forma considerablemente atenuada.
El derecho que se
formula como “de vida y
muerte” es en realidad el
derecho de hacer morir
o de dejar vivir.
Otra consecuencia del desarrollo
del bio-poder es la creciente
importancia adquirida por el
juego de la norma a expensas
del sistema jurídico de la ley
El sexo es, a un tiempo,
acceso a la vida del cuerpo y
a la vida de la especie.
Para el poder la sangre
era un mecanismo
utilizado con frecuencia,
la lucha de la vida, del
hambre, una forma de
someter a la sociedad.
Puede admitirse que la sexualidad
no sea, respecto del poder, un
dominio exterior en el que éste se
impondría, sino, por el contrario,
efecto e instrumento de sus arreglos
o maniobras.
En la psiquiatrización de las
perversiones, el sexo fue referido
a funciones biológicas y a un
aparato anatomofisiológico que
le da su “sentido” (Finalidad).
El “sexo” es descrito como atrapado
entre una ley de realidad y una
economía de placer que siempre
trata de esquivarla.
El coitus interruptus, representa: el
punto donde la instancia de lo real
obliga a poner un término al placer
y donde este placer logra realizarse a
pesar de la economía de
lo real.