El uso compulsivo de dispositivos, aplicaciones y redes sociales está dando origen a una nueva clase de enfermedades relacionadas con estas actividades. Tristemente, la tecnología utilizada sin controles y de forma inadecuada está llegando a extremos de afectar física y mentalmente a quienes confían sus vidas en ella.
Cinco enfermedades de la ‘nueva era.
Anotações:
El uso compulsivo de dispositivos, aplicaciones y redes sociales está dando origen a una nueva clase de enfermedades relacionadas con estas actividades. Tristemente, la tecnología utilizada sin controles y de forma inadecuada está llegando a extremos de afectar física y mentalmente a quienes confían sus vidas en ella.
1. El estrés de los teléfonos inteligentes
Anotações:
Científicos de la Universidad de Worcester, en el Reino Unido,descubrieron una fuerte relación entre la utilización de smartphones y el estrés, en la medida que las personas comienzan paulatinamente a elevar la cantidad de veces que revisan sus dispositivos en busca de mensajes y alertas. Según el estudio, además de ser compulsiva, esta conducta está llegando a niveles en que los usuarios experimentan vibraciones ‘fantasma’ en sus bolsillos, cuando en realidad no tienen alertas.
2. Desordenes de sueño
Anotações:
La luz artificial de pantallas de computadores portátiles, tabletas digitales, televisores y teléfonos inteligentes pueden reducir la producción de melatonina, hormona que ayuda a conciliar el sueño. De acuerdo con la Universidad de Gothenburg (Suecia), estos desordenes al dormir se traducen en un incremento del estrés y en el surgimiento de síntomas de depresión en jóvenes adultos. La recomendación es una: Evitar el uso de estos dispositivos –y apagarlos de ser necesario–, durante los momentos de descanso.
3. Pérdida de atención por redes sociales
Anotações:
A pesar de los grandes beneficios que traen las principales redes sociales, en términos de acercar a las personas y difundir rápidamente contenidos en cualquier momento y lugar, estos sitios web también están generando problemas sicológicos, en especial en los menores de edad. Para no ir muy lejos, según la científica británica Susan Greenfield, Facebook estaría generando desordenes de pérdida de atención entre los niños: “Si los cerebros jóvenes son expuestos desde el comienzo a un mundo de rápida acción y reacción, de nuevas imágenes intermitentes cada vez que oprime una tecla, tal intercambio rápido puede acostumbrar al cerebro a funcionar en esas escalas de tiempo”, comenta.
4. Pérdida de audición
Anotações:
Pocas cosas son más ricas que ponerse unos audífonos para olvidarse del planeta mientras escuchamos nuestras canciones favoritas, al hacer labores del hogar, ejercitarnos o simplemente cuando vamos al trabajo o al colegio. Sin embargo, el mal hábito de usar el volumen más alto de lo recomendable, está generando graves problemas acústicos entre esta generación. La pérdida de audición es una enfermedad lenta y progresiva, que solo se nota después de años de daño acumulado. En estos casos, el mal uso de los audífonos está generando sorderas entre los 30 y 40 años, lo cual es hasta 20 años antes de lo que se presentaba en generaciones pasadas.
5. El síndrome cuasimodo
Anotações:
¿Qué probabilidades existen de que, mientras lee este artículo, usted esté escurrido en su silla o recostado en la mesa, al tiempo que su cabeza está caída al frente, sus hombros curvos y sus brazos doblados? Seguramente, esta posición es la responsable de sus dolores de espalda y cuello. Conocida como ‘text neck’ (el cuello del escritor), es la postura repetitiva que adopta la mayoría de personas al escribir en celulares, usar juegos digitales o utilizar computadores portátiles.
En este caso, lo único razonable por hacer es reducir el tiempo que se permanece en línea para salir con amigos reales.