establece que existe una
determinada propiedad
denominada temperatura
empírica θ, que es común para
todos los estados de equilibrio
termodinámico que se
encuentren en equilibrio
mutuo con uno dado.
Primera ley
establece que si se realiza
trabajo sobre un sistema o bien
este intercambia calor con otro,
la energía interna del sistema
cambiará.
Segunda ley
Este principio marca la
dirección en la que deben
llevarse a cabo los procesos
termodinámicos y, por lo tanto,
la imposibilidad de que ocurran
en el sentido contrario
Tercera ley
La tercera ley de la
termodinámica, más
adecuadamente Postulado
de Nernst afirma que no se
puede alcanzar el cero
absoluto en un número
finito de etapas.