Toda argumentación tiene además de un método
unos principios básicos que cumplir.
Principio de no contradicción
Según este principio no
puede ser al mismo
tiempo una afirmación y
su contraria, una cosa no
puede ser verdadera y
falsa a la vez. Este es el
principio más
importante de la
argumentación racional.
Principio de la deducción
Este principio indica que
a toda causa conlleva un
efecto, conduce a
cadenas de efectos.
Ejemplo
Cuando alguien afirma: “si llueve se
mojan las calles” y, efectivamente
llueve, podemos afirmar que las
calles se mojan.
Las cadenas de causas-efectos pueden ser
amplias, por ejemplo: si llueven se mojan las
calles, si llueven las calles puedes resbalarte y
caer.
Principio del tercio excluso
Según este principio
si una cosa no es
verdadera es falsa y si
no es falsa es
verdadera.
Con el principio de no contradicción es
evidente, pero se critica, como
dijimos, su amplitud ya que hay
situaciones en donde las afirmaciones
no son ni verdaderas ni falsas sino
solamente probables o tienen valor
de verdad desconocido.
Principio del Onus Probandi o de Carga de la Prueba
Es el principio según el cual
el que hace una afirmación
debe dar pruebas de su
veracidad, no corresponde
al que refuta la refutación
sino a quien afirma la
demostración.
Ejemplo
Si alguien afirma que
existe una raza de enanos
invisibles en los bosques
debe probar que esta
afirmación es cierta y no
solicitar a terceras
personas que prueben que
es falsa.
Si pensamos en este ejemplo nos damos
cuenta de que es imposible demostrar la
falsedad de una afirmación infundada ¿cómo
demostrar que no existen seres invisibles
Principio de Economía o Navaja de Occam
Este principio nos dice que
entre dos teorías que
expliquen un mismo
fenómeno la más sencilla es
verdadera, a menos que se
demuestre lo contrario. La
explicación más sencilla debe
ser racional y estar en
coherencia con el corpus de
conocimientos previamente
adquiridos, si no es así no es
aplicable este principio.
“Es más sencillo pensar que Dios creó el
mundo en seis días que pensar que se
produjo por el Big Bang hace, nada menos
que, 15.000 millones de años, luego Dios creó
el mundo en seis días”.
Ejemplo
“- No se donde están
las llaves, eso es que
el gnomo verde
invisible y volador
que hay en mi casa
las ha robado. – Oye
¿no será que has
olvidado donde las
pusiste? –
¡Nooooooooooo! Ha
sido el gnomo, te lo
digo yo.”
Principio de El onus probandi
Nos dice que todo acusado
es inocente hasta que no se
demuestre lo contrario:
quien afirma que alguien ha
cometido un delito debe
probarlo y no solicitar que el
acusado pruebe la falsedad
de la acusación.
Ejemplo
“Tu dices que eres mi
amigo pero no tienes
ninguna prueba de
ello, luego es falso
que seas mi amigo”.
De igual manera se comete una
falacia de desprecio del onus
probandi cuando no se tiene en
cuenta la aplicación de este
principio y se solicita al refutante
la demostración y no al
afirmante. Por ejemplo: “Aún no
me has demostrado que Dios no
exista, luego Dios existe”.