Criado por AmaiaJuanchuto
mais de 10 anos atrás
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Al no obtener respuesta abrio y se encontro con una (Nombre) de labios morados, cuerpo desinflado, ojos desencajados, mirada perdida, que daba su ultimo suspiro. El diagnostico de John fue una congestion estomacal aguda.
“¡Tú no opinas nada y se acabó! Nunca, por generaciones, nadie en
mi familia ha protestado ante esta costumbre y no va a ser una de mis hijas quien lo haga."
Unos celos infernales le corroian las entrañas. No le agradaba nada tener que asistir a la boda y soportar ver la imagen de Tita junto a John.
Parecia que el alimento que estaba ingiriendo producía en ella un efecto afrodisíaco, pies empezó a sentir que un intenso calor le invadian las piernas. Un cosquilleo en el centro de su cuerpo no la dejaba estar correctamente sentada en su silla.
"Ya no hay nadie en la cocina mi niña, llora ahora, porque mañana no quiero que te vean hacerlo. Mucho menos Rosaura."
Una nube rosada llegó hasta él, lo envolvió y provocó que saliera a todo galope hacia el rancho de Mamá Elena, abandonó el campo de batalla dejando atrás a un enemigo a medio morir, sin saber para qué.
El niño, por tanto, en lugar de ser un motivo de separacion entre ambos termino por unirlos más.Tal parecia que la madre del niño era Tita y no Rosaura.
Cocinera del rancho y nana de Tita, ella fue como la madre de Tita a la que quiso mucho y a la que le enseño todo lo que esta sabía del arte culinario.
“Entonces ¿es eso? Ahora entiendo perfectamente lo que te pasa. No quieres hablar con John porque tal vez estás dudando entre quedarte a mi lado o casarte con él ¿verdad? Ahora ya no estás atada a mí, un pobre enfermo. “
Desde la muerte de su esposa, cinco años atrás, nunca habia vuelto a sentirse atraido hacia ninguna mujer. El recien casados, lo habia dejado insensible para el amor todos estos años. Que extraña sensacion le producia el observar a Tita.
“(...) y que voy a romper cuantas veces sea necesario, mientras esa maldita tradición no me tome en cuenta. Yo tenla el mismo derecho a casarme que tú, y tú eras la que no tendra derecho a meterse en medio de dos personas que se querían profundamente.”
Se encontró con una agradable mujer como de 80 años de edad. Era muy parecida a Nacha. Una larga trenza cruzada le cubría la cabeza, estaba limpiándose el sudor de la frente con el delantal. Su rostro tenía claros rasgos indígenas.
(Nombre) no tenía carácter, le importaba mucho aparentar en la sociedad, seguía gorda y pestilente, pues ni con el remedio que Tita le dio puedo aminorar su intenso problema. ¿Que pasaría si Pedro la abandonara por ella?
"¡Siéntate a trabajar! Y no quiero lagrimas. Pobre criatura, espero que el Señor lo tenga en su gloria, pero no podemos dejar que la tristeza nos gane, hay mucho que hacer. Primero terminas y luego haces lo que quieras, menos llorar, ¿me oíste?"
Una señora norteamericana de 70 años, que aparte de encargarse de la cocina tenia la misión de cuidar de Alex, el pequeño hijo del doctor.
Mamá Elena quedo muy desconcertada ante la actitud que habían tenido para con ella; no correspondía a la de los matones desalmados que esperaba. Desde ese día prefirió no opinar sobre los revolucionarios. De lo que nunca se entero es de que ese era el mismo (nombre) que meses antes se había llevado a su hija Gertrudis.
“Vete a dormir mi niña, yo termino el turrón. Solo las ollas saben los hervores de su caldo, pero yo adivino los tuyos, y ya deja de llorar, que me estás mojando el fondat y no va a servir, anda, ya vete."
“Te felicito—le dijo--, las puntadas son perfectas, pero no lo hilvanaste, ¿verdad?"
Segunda hija de Rosaura y Pedro, que después tiene una hija con Alex.
“Tita, quisiera decirle que considero un lamentable error de su parte la idea que tiene de casarse con John. Aún está a tiempo de no cometer esa equivocación, ¡no acepte ese matrimonio, por favor!”
“Querida tita:
No sabes cómo te agradezco el que me hayas enviado mi ropa. Por fortuna aún me encontraba aquí y la pude recibir. Mañana voy a dejar este lugar, pues no es el que me pertenece. Aún no sé cual será, pero sé que en alguna parte tengo que encontrar un sitio adecuado para mí...”
"Doña Elena, no se altere por favor, le hace daño. Yo le quito esa charola, pero dígame ¿no tiene deseos de comer?"
“De ninguna manera, doctor, si fuera la medicina todo el tiempo tendría ese sabor en la boca y no es así. Algo me están dando con la comida. Curiosamente desde que Tita regresó. Necesito que lo investigue.”
(Nombre)extrajo sólo media cucharadita de este aceite para mezclar lo con aceite de almendras
dulces y preparar una excelente pomada para los labios.
(Nombre)lanzó una plegaria en silencio y con los ojos cerrados, pidiendo que Tita viviera
muchos años más cocinando las recetas de la familia.