Selecione da lista do Menu para completar o texto.
Lejos, muy lejos, en la profunda caverna de un país extraño, vivía un dragón cuyos ojos centelleaban como tizones ardientes.
Todos los habitantes del pueblo cercano estaban ( asustados, contentos, animados ) y esperaban que alguien fuera capaz de matarlo. Las madres temblaban cuando oían hablar de él y los niños lloraban en silencio por miedo a que el dragón les oyese.